BAGDAD (Reuters) - Irak ya no está al borde de la guerra civil, pero los recientes progresos en la seguridad son frágiles y reversibles, dijo el sábado el máximo responsable militar estadounidense en el país árabe, el general David Petraeus.
También mencionó los progresos en los vecindarios iraquíes, y dijo que los ataques con armas iraníes se han reducido, elogiando a Siria y Arabia Saudí por disminuir el flujo de combatientes extranjeros que llegan al país.
El desafío para 2008, el sexto del conflicto, sería lograr mayores avances en la seguridad y ayudar a Irak a restaurar los servicios, crear empleos y agilizar el proceso de la reconciliación nacional.
"El éxito surgirá lentamente y estará lleno de reveses y avances. Inevitablemente habrá duros enfrentamientos, algunos días y semanas más complicadas, pero serán menos, 'inshalah' (Con la voluntad de Dios, en árabe)", sostuvo Petraeus.
Añadió que la mejoría en la situación de seguridad se debió en parte al cese al fuego declarado por la milicia chií del clérigo Moqtada al Sadr.
Sin embargo, las cifras dadas a conocer en la rueda de prensa demostraron que el número de atentados suicidas y con coches bomba se están registrando nuevamente con mayor frecuencia después de una disminución en octubre.
