El salón del automóvil de Frankfort está resultando ser un antídoto a la crisis, sobre todo para Daimler y BMW, que juegan en casa. Las dos entidades alemanas han construido grandes pabellones en los que exponen las novedades que han desarrollado en muchos de los segmentos del mercado. Las alemanas tratan de demostrar la capacidad y fortaleza de su industria y eso se refleja en sus resultados en bolsa.
BMW registra alzas superiores al 5% después de confirmar su mayor apuesta por el mercado asiático frente al europeo. Sus títulos se sitúan en torno a los 53 euros y se confirman como los que más suben en la jornada en el Eurostoxx 50 tras Deutsche Börse y Axa. La compañía teutona, que tiene recomendación de mantener para el consenso de mercado, se desmarca así de su mínimo en nueve meses marcado el 19 de agosto, donde sus acciones cayeron hasta los 49,90 euros. Desde entonces BMW ha avanzado un 7,21%.
La compañía alemana, al igual que su competidor Volkswagen está explotando el tirón que tienen en la actualidad los coches de lujo en Asia, aprovechando el creciente gusto por lo exclusivo derivado del tirón económico que han experimentado los países emergentes en los últimos años.
Por su parte, el gigante automovilístico Daimler también acumula alzas del 4,09% hasta situar el valor de sus acciones en 33,13 euros. El fabricante de coches que posee en su poder marcas como Mercedes o Maybach, tiene recomendación de compra y se está beneficiando del rebote generalizado que consigue el Dax30, su otro indice de referencia.
Además, los buenos datos de la actividad industrial alemana durante el último mes están favoreciendo el repunte de las compañías del sector. Su rebote se produce después de que ambas entidades hayan anunciado su intención de crear nuevas fábricas y ampliar los turnos de los trabajadores para cumplir con la demanda que están teniendo.
