
Bruselas, 12 sep (EFE).- La Comisión Europea negó hoy que esté trabajando sobre un escenario de posible suspensión de pagos en Grecia, como podría estar haciendo Alemania según el semanario "Der Spiegel".
"La respuesta es no", respondió el portavoz de Asuntos Económicos de la Comisión Europea, Amadeu Altafaj, preguntado por si el Ejecutivo de la UE está contemplando esta posibilidad.
"Nuestra posición es la misma, no ha cambiado", añadió Altafaj en referencia a la situación griega.
El portavoz recordó además que las nuevas medidas de ajuste anunciadas por Grecia este domingo -un nuevo impuesto sobre la propiedad inmobiliaria y la renuncia a una paga mensual del salario de los políticos y altos funcionarios- "reafirman el compromiso de las autoridades griegas de alcanzar todos los acuerdos acordados".
Grecia está obligada a cumplir con un plan de ajuste y unas reformas estructurales específicas para recibir el sexto tramo del primer paquete de ayuda financiera, 8.000 millones de euros.
Representantes de la CE, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional regresarán esta semana a Atenas, después de abandonar el país temporalmente el pasado 2 de septiembre para dar más tiempo al Ejecutivo griego a completar los trabajos técnicos.
"Esperamos que nuestros colegas vayan a Atenas esta semana para que ayuden a las autoridades griegas a completar el trabajo necesario para retomar esta revisión", añadió el portavoz y recordó que el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, espera que la evaluación haya concluido a finales de mes.
Sin embargo, fuentes comunitarias confirmaron hoy que "sí es posible" que Grecia se quede sin fondos en 25 días, como aseguró el secretario de Estado de Finanzas griego, Filipos Sajinidis.
Según Sajinidis, Grecia tiene dinero para pagar los sueldos públicos y las pensiones sólo hasta octubre, lo que hace esencial que se entregue el sexto tramo del préstamo internacional de 110.000 millones de euros aprobado en mayo de 2010.
No obstante, este ya fue el caso en los tramos anteriores, "la asistencia cada tres meses es imprescindible porque Grecia está aislada de los mercados y no dispone de reservas de fondos suficientes", añadieron las mismas fuentes.