El índice de la Bolsa de Bombay, el Sensex 30, pierde soportes clave y pone fin así a su tendencia alcista.
Después de haber cerrado nuestra exposición a Malasia la semana pasada, ésta arranca con la despedida a las últimas posiciones que teníamos en India. La tendencia bajista no perdona a nadie.
Algunos emergentes estaban logrando capear el temporal que ha devuelto a la renta variable a la tendencia bajista. Sin embargo, la presión general ha conseguido minar su resistencia. Así, la semana pasada cayó Malasia, y ésta hemos dicho adiós a nuestras posiciones vía fondo cotizado (ETF) en la India.
Por si fuera poco, este arranque de semana nos deja otros dos cierres, uno total en el caso de Fresenius, y otro parcial en el de Sigma-Aldrich. Así, con la desconfianza que genera el mercado pese al rebote que se gestó el viernes, la exposición a bolsa de nuestra cartera propuesta a tres meses baja un punto, hasta el 19%, mientras que la liquidez se sitúa ya en el 66%.
Sin ir más lejos, en el cierre del pasado viernes, el índice indio (Sensex) perdió el soporte clave que presentaba a la altura de los 17.300 puntos. Hace dos semanas se había quedado justo por encima de este soporte pero pasada la presión vendedora pudo finalmente con esta referencia, lo cual nos invita a cerrar la estrategia alcista que teníamos abierta en la India.
La pérdida de soportes clave sugieren que, rebotes al margen, las caídas podrían tener continuidad en próximas semanas y quien sabe si meses, puesto que el patrón bajista confirmado advierte del fin de la tendencia alcista que tuvo su origen en los mínimos de marzo de 2009, que podría ser parcialmente corregida en próximos meses.
De hecho, un ajuste de dos terceras partes de esta tendencia sería algo no descartable y supondría asistir a caídas adicionales en torno a un 25% desde actuales niveles.
