LONDRES (Reuters) - Las compras de deuda de bonos italianos y españoles por parte del Banco Central Europeo (BCE) recortaban el lunes la rentabilidad de la deuda de los dos países, mientras los bonos alemanes subían pronunciadamente ante el nerviosismo de los inversores después de un recorte en la calificación de EEUU que llevaba a evitar los activos de riesgo.
Agentes de mercado indicaban que el BCE estaba comprando principalmente bonos italianos y españoles a 5 años, aunque también adquiría vencimientos de hasta 10 años, junto con otros títulos de la denominada periferia del euro, tras indicar el domingo que "implementaría de manera activa" su programa de compra de bonos.
Las rentabilidades española e italiana caían en más de un punto porcentual.
El rendimiento de los bonos italianos a 10 años cotizaba al 5,33 por ciento, por encima de un mínimo de sesión del 5,18 por ciento, un nivel que no se veía desde el 22 de julio, tras el acuerdo para el segundo paquete de préstamos a Grecia. El título español equivalente cotizaba 12 puntos básicos por debajo.
Con todo, la intervención del BCE se consideraba sólo como una solución temporal, debido al tamaño del mercado de bonos italiano: 1,6 billones de dólares.
Según algunos analistas, es necesario que se adopten medidas más profundidad y a largo plazo con el fin de evitar que se desaten los riesgos de la eurozona.
"Pueden aguantar varias semanas, pero no creo que tengan un impacto duradero en el mercado", dijo Glenn Marci, analista de tipos de interés de DZ Bank.
"Si los spreads italianos siguen ampliándose, no serían capaces de controlarlo. Necesitarían mucha más munición para contener el mercado. Las últimas compras de bonos fueron en Grecia, Portugal e Irlanda, pero se trataba de mercados pequeños", agregó.
Agentes estiman que el impacto psicológico del anuncio del BCE habría sido mayor que las compras finales, y que la entidad tendría que elevar su apuesta en los próximos días.
"Comprando 1.000 millones aquí o allá puedes lograr rápidos movimientos de dinero y algo de estrechamiento en los diferenciales, pero la tendencia subyacente para los diferenciales sigue siendo de aumentar", dijo un agente.
Las compras de bonos por parte del BCE están destinadas a ganar tiempo hasta que el recién creado Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) pueda intervenir en los mercados secundarios de deuda una vez que reciba la aprobación de los parlamentos nacionales, algo que podría suceder en septiembre.
Pero persisten dudas sobre si los 440.000 millones de euros con que cuenta el fondo puedan combatir órdenes masivas de venta de la deuda española e italiana.
"Si elevas el FEEF a un billón o algo así podrías ver compradores desde dentro del mercado", dijo el agente.
- Gráficos de la crisis de deuda de la eurozona: http://r.reuters.com/hyb65p
SALTAN CDS DE FRANCIA
Una huida masiva desde la renta variable hacia bonos del tesoro estadounidense tras la bajada de calificación crediticia de EEUU por parte de Standard & Poor's a AA+ llevó a los futuros del Bund a crecer más de un punto, a 133,46.
El valor cotizó en un amplio rango, entre 130,57 y 133,67. Los rendimientos alemanes a 10 años cayeron por debajo del 2,25 por ciento durante la sesión.
"Es una relocalización masiva, de activos de renta variable hacia los Bunds", dijo un segundo operador.
"¿Italia y España están protegidos por ahora por el BCE pero fuera de allí el foco está puesto en la situación mundial y estamos mirando a los recortes de tipos de interés y a las inyecciones de liquidez globales?", se preguntó.
El coste de asegurarse contra un impago de la deuda francesa marcó un nuevo máximo de 160 puntos básicos (pb) el lunes, subiendo 15,5 pb en la sesión, con la deuda soberana gala vista como la próxima que probablemente pierda su calificación de triple-A.
El CDS francés subió 55 pb desde el 22 de julio ante temores de que la crisis de deuda de la eurozona pueda propagarse a países centrales del bloque. La semana pasada, el diferencial entre el bono francés a 10 años y el referencial alemán marcó un máximo desde la creación del euro alcanzando los 91 pb.
/Por Marius Zaharia/