PARÍS/BOGOTÁ (Reuters) - El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, aceptó el viernes la creación de una zona de encuentro en el país para negociar directamente con la guerrilla de las FARC la liberación de los rehenes que mantiene secuestrados, entre ellos la política franco-colombiana Ingrid Betancourt.
La mujer fue secuestrada por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) durante su campaña electoral hace cerca de seis años y Sarkozy ha convertido su liberación en una prioridad.
Los rebeldes quieren que el presidente colombiano desmilitarice un área rural del tamaño de la ciudad de Nueva York durante 45 días para sostener conversaciones sobre el acuerdo de los rehenes.
El presidente dijo que su alto comisionado para la paz, Luis Carlos Restrepo, a quien autorizó para un encuentro directo con la guerrilla, debe definir conjuntamente con los rebeldes y con la Iglesia Católica el lugar de la zona de encuentro.
Sarkozy ha aumentado sus esfuerzos en las últimas semanas para asegurar la liberación de la ex candidata presidencial colombiana, enviando esta semana mensajes de radio y televisión al líder del grupo marxista que la mantiene retenida, instándole a dejarla en libertad.
En su mensaje al líder de la guerrilla, Manuel Marulanda, Sarkozy dijo que condenaba sus métodos y no compartía sus ideas, pero le instó a devolver a Betancourt a su familia para las fiestas de Navidad basándose en cuestiones humanitarias.