SEVILLA, 29 (EUROPA PRESS)
El secretario general de CC.OO., José María Fidalgo, apuntó hoy que el incremento del Indice de Precios al Consumo (IPC) armonizado en noviembre es un "dato malo" que "estaba anunciado", por lo que pidió a las diferentes administraciones y partidos políticos que "se dejen de subastas y rebajas fiscales y simulacros que no van a a resolver nada".
Fidalgo, que consideró que "hay que apretar las tuercas a la economía española" tras conocer el aumento hasta el 4,1% del IPCA, indicó que este aumento es normal teniendo en cuenta que la economía española "ha estado funcionando con un patrón de crecimiento que anticipaba este giro, al generarse en estos últimos años muchísima riqueza y unos desequilibrios tremendos".
En este sentido, agregó que dicho modelo de crecimiento se ha basado en sectores "no competitivos", como la construcción ó los servicios de baja calidad. Por ello, demandó a las administraciones públicas que "conjuguen esfuerzos en vez de pelearse, y se cambie el patrón de crecimiento para salir del bache".
El dirigente sindical, que prevé que en los próximos días se pueda reeditar el Acuerdo de Negociación Colectiva, agregó que a este modelo de crecimiento "la ha venido bien la inmigración, al contar con mano de obra poco cualificada y también una fragilidad en el control de la Inspección de Trabajo".
Igualmente, indicó que este modelo produjo efectos colaterales "dañinos", entre ellos, la "saturación" del mercado de la vivienda, además de "no resolver el problema de la falta de competitividad".
Fidalgo precisó también que los sectores que más han crecido en los últimos años han sido los sectores "más inflacionistas". En cualquier caso, dijo que el dato "no es para tirar cohetes, pero tampoco para echarse a llorar".
Como medida para atajar la subida de precios, Fidalgo abogó por una distribución "más eficaz" de la presión fiscal, ya que "en estos años", los gobiernos han sido "muy generosos", especialmente con las rentas más altas y con las empresas.
El dirigente sindical agregó que aquellas empresas competitivas, con presencia en el exterior y que ofrecen buenos contratos "deberían tener diez años de 'impuestos cero', mientras que las cargas fiscales que se se generaran se deben repartir entre las empresas que pretenden obtener beneficios rápidos".
Finalmente, hizo un llamamiento a los sindicatos "para que no se olviden en la negociación colectiva de incluir en los convenios cláusulas de garantía salarial, que es la única forma de preservar los salarios de las subidas de los precios".