Milka, Toblerone, Philadelphia, El Caserio, Saimaza o Suchard. Todas ellas marcas conocidas por los consumidores y que distribuye la estadounidense Kraft Foods. Una compañía que en el mercado endulza a sus accionistas, entre los que reparte más del 50 por ciento de su beneficio. Este pay out es uno de los más elevados en el Dow Jones, pues sólo AT&T y Verizon destinan más porcentaje de sus resultados a retribuir al accionista.
La compañía de alimentación entregará el próximo dividendo el 14 de julio y es uno de los más cercanos entre los grandes de Wall Street a los que todavía puede acceder el inversor, siempre que compre el título antes del 5 de julio. Los 0,29 dólares que abonará Kraft Foods también suponen un importante rendimiento, teniendo en cuenta que es un pago trimestral y que en EEUU las políticas de retribución no son tan atractivas como en Europa. El pago proporciona una rentabilidad del 0,85 por ciento, a precios actuales. Para el conjunto del año, el accionista de la compañía puede anotarse un rendimiento en torno al 3,4 por ciento. Esta rentabilidad por dividendo también sitúa al valor entre los seis más atractivos del Dow Jones en este sentido.
Quien no puede presumir todavía de eso es la tecnológica Cisco, que hasta hace unos meses era incluso la única compañía del índice que no repartía dividendos. Cisco, que entregó su primera retribución en abril, vuelve a remunerar al accionista con 6 centavos. Esta vez la rentabilidad del pago será ligeramente superior -un 0,4 por ciento, frente al 0,35 anterior- puesto que sus títulos se han desplomado en el parqué y ya cotizan en mínimos desde marzo de 2009.