
Era de los pocos que quedaban por publicar las cuentas del primer trimestre, pero la espera ha merecido la pena. La cadena textil ha batido las previsiones del mercado al presentar un beneficio neto para el primer trimestre de 332 millones de euros frente a los 316 previstos por los analistas que siguen su evolución. Esa cifra es, además, un 11% superior a los resultados del mismo periodo del año anterior. Y para redondear la jugada, bate a su competidor directo, la cadena sueca Hennes & Mauritz (conocida popularmente como H&M), que presentó un beneficio neto de 286 millones de euros para los primeros tres meses de 2011.
La clave para entender cómo Inditex ha esquivado las alzas en materias primas como el algodón, que son difíciles de trasladar al precio del producto que llega al consumidor final, es que la compañía haya optado por la expansión internacional de su negocio, prestando especial atención a los mercados emergentes. Según Bloomberg, la compañía gallega ha empezado a abrir outlets para compensar la debilidad del consumo en mercados más maduros como el europeo. En añadidura, en la nota oficial sobre sus resultados que remitió la textil a la CNMV se anticipa que en los próximos meses abrirá nuevas tiendas de su cadena Zara en Sudáfrica, Taiwán y Perú.
En lo que llevamos de sesión hasta 5 firmas de inversión han reiterado sus respectivos consejos sobre Inditex, manejando una horquilla de valoraciones entre los 67,5 euros (que fija Santander, con una recomendación de compra) y los 42 euros (donde la sitúa Credit Suisse, que aconseja sobreponderar). El consenso de mercado recomienda mantener sus títulos con un precio objetivo de 66 euros por acción, valoración que proporciona a la compañía a precios actuales un potencial del 6,85 por ciento a doce meses. Donde no ha habido reacciones ha sido en bolsa; el valor se mantiene en positivo por la mínima, mientras que el Ibex 35 sufre un duro ataque bajista que le acerca a la cota de los 10.000 puntos.