
Washington, 26 may (EFE).- El Fondo Monetario Internacional (FMI) intentó hoy desmarcarse de la crisis generada tras la renuncia del francés Dominique Strauss-Kahn al cargo de director gerente del organismo, en medio de un escándalo sexual, y reafirmó su "compromiso" como institución financiera.
"Las investigaciones criminales a las que está sujeto el exdirector gerente Dominique Strauss-Kahn están separadas de la institución", señaló la portavoz del FMI, Caroline Atkinson, en la primera rueda de prensa del organismo internacional tras la dimisión del alto funcionario el pasado jueves.
"Debemos aprender de las situaciones complicadas (...) y mirar hacia adelante", añadió la portavoz.
DSK, como es conocido por sus iniciales el político y economista francés, se encuentra bajo arresto domiciliario en Nueva York, donde está acusado de abuso sexual e intento de violación a una empleada del hotel en el que se alojaba el pasado 14 de mayo, cargos por los que podría enfrentar hasta 25 años de cárcel en EE.UU.
Desde la dimisión de Strauss-Kahn, el FMI no había realizado ninguna conferencia de prensa y la comunicación con los medios se había limitado al envío de notas de prensa.
Atkinson, en su rutinaria comparecencia quincenal con los periodistas, mantuvo la habitual cautela del FMI y marcó distancia a la hora de valorar el escándalo de su exjefe, ante las numerosas preguntas de los reporteros.
Asimismo, se escudó en que se trata de un "proceso judicial abierto", por lo que calificó de "inapropiado" valorar la situación de Strauss-Kahn, de 62 años.
"Hay serios cargos criminales (contra él), pero de momento no hay condena", fue todo lo que comentó Atkinson al respecto.
"No somos perfectos, debemos pensar cómo podemos hacer para comportamos mejor. No creo que haya un fallo del sistema, estamos a la luz pública y debemos demostrar transparente y claramente quiénes somos y cómo nos comportamos", agregó.
Para la portavoz del FMI, el organismo ha mostrado su "compromiso y experiencia al continuar con su trabajo financiero internacional" durante estas semanas.
"Lo que es apropiado es discutir cómo es el FMI. Debemos ir hacia adelante y continuar nuestras operaciones con los diversos países con los que trabajamos", dijo.
La repentina salida de Strauss-Kahn como director gerente del FMI ha despertado la pugna de poder latente en el seno del organismo internacional entre los países emergentes y los avanzados.
Los países emergentes, que llevan años exigiendo una mayor representatividad en el FMI con el argumento del creciente peso mundial de las economías en desarrollo, han visto ahora la oportunidad para desafiar la tradición no escrita que concedía que el director del fondo fuera un europeo.
Este acuerdo verbal había sido cumplido en la práctica, en virtud de un pacto de caballeros mantenido desde la fundación del FMI, y su institución hermana, el Banco Mundial, en la cumbre de Bretton Woods en 1945.
Sin embargo, los países en desarrollo escenificaron su intención de romper esta tradición, que calificaron de "obsoleta", el pasado viernes con un comunicado emitido por el llamado grupo BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica).
"La convención de que la selección del Director Gerente sea hecha, en la práctica, en base a la nacionalidad debilita la legitimidad del Fondo Monetario Internacional (FMI)", indicaron los representantes del organismo multilateral de estos países.
Salían así al paso del cierre de filas en los últimos días por parte de Europa en torno a la candidatura, formalizada ayer, de la actual ministra de Finanzas francesa, Christine Lagarde, para suceder a Strauss-Kahn.
Y, desde el grupo de los emergentes, también han comenzado a conocerse rápidamente los nombres de candidatos como el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, o el director del Banco Nacional de Kazajistán, Grigori Márchenko.
Atkinson, no obstante, defendió el procedimiento de selección del nuevo director gerente del FMI, que se abrió el lunes 23 de mayo y que concluirá el 30 de junio.
"Hemos detallado los requisitos: visión estratégica, conocimiento de los problemas de la economía mundial, imparcialidad y objetividad", explicó.
Y reiteró, sin dar más detalles, lo dicho por el fondo al informar sobre el inicio de la recepción de candidatura la pasada semana: "el proceso será abierto, basado en méritos y transparente".