
Ericsson cae alrededor de un 25% después de anunciar que sus resultados trimestrales se situarán por debajo de las expectativas del mercado y de sus propias previsiones. La compañía espera ahora un beneficio neto de 4.000 millones de coronas suecas (437 millones de euros) frente a los 6.200 millones registrados hace un año. Los analistas habían estimado un resultado neto de 6.140 millones.
El gigante sueco de infraestructuras <:ERICB.ES:> espera ahora unas ventas de 43.500 millones de coronas suecas (unos 4.763 millones de euros), un beneficio operativo de 5.600 millones de coronas suecas y un flujo de caja negativo de 1.600 millones para el período.
Malas expectativas
Thomas Langer, analista de West LB ha considerado que "lamentablemente" este "desastre" va más allá de un problema circunstancial en el tercer trimestre y ha señalado problemas "profundos" para la compañía más allá de los últimos meses.
Este resultado inesperado en el tercer trimestre se debe principalmente a un déficit en las ventas en la red móvil, con software mejorados y ampliados, se han traducido en una "desfavorable combinación de negocios" que han afectado a los márgenes del grupo, según ha indicado la compañía en un comunicado.
Duro recorte en bolsa
Ericsson se ha derrumbado en bolsa, con una caída del 25%, hasta los 19.64 dólares, y ha arrastrado a otras compañías de su sector, como Nokia y Alcatel-Lucent, que se dejan alrededor de un 4%.