El Tesoro español emitió este jueves más de 4.000 millones de euros en obligaciones a 10 y 30 años a tasas más bajas que en la anterior emisión del mismo tipo, al igual que en la emisión del lunes, lo que muestra la recuperación de la confianza en España de los mercados.
El Tesoro recaudó 3.218 millones de euros en obligaciones a 10 años a una tasa media del 5,162%, menor que el 5,20% de la última subasta del mismo tipo, efectuada el pasado 17 de febrero, que a su vez ya estaba en baja.
También fue más baja que la tasa registrada al cierre de los mercados el miércoles, del (5,174%).
Además consiguió recabar 911 millones de euros en obligaciones a 30 años a una tasa media del 5,875%, más baja que la del 5,957% de la última subasta del mismo tipo, también el 17 de febrero, y que la registrada en los mercados el miércoles al cierre (5,883%).
La emisión de este martes registró una fuerte demanda, de más de 7.600 millones de euros, casi el doble de lo finalmente adjudicado.
Desde hace unas semanas, la tasa de las emisiones de bonos españoles están en baja, después de un incremento gradual en 2010 ante las dudas de los mercados sobre la capacidad financiera de España.
Estas dudas empezaron a manifestarse al aprobarse el plan de rescate financiero a Grecia, en febrero de 2010, continuaron con la aprobación del plan de rescate a Irlanda, en noviembre, y algunos expertos temieron en los últimos meses que también Portugal e incluso España pudieran necesitar ayuda financiera internacional.
La semana pasada, la agencia de calificación financiera Moody's bajó un escalón la nota soberana de España a "Aa2" con perspectiva negativa debido a su escepticismo sobre la capacidad financiera del país y por el que considera alto coste de la actual reforma del sector bancario.
Doce 12 entidades financieras, entre ellas ocho cajas de ahorros, necesitan 15.152 millones euros para alcanzar el mínimo de solvencia exigido por el gobierno en el proceso de reforma del sector bancario, muy afectado por la crisis inmobiliaria.
