El terremoto de Japón está sembrando el pánico entre los inversores. El impacto que puede tener la catástrofe en la economía mundial es difícil de cuantificar, pero por lo pronto los inversores ya se están protegiendo. Después de que los mercados europeos estén siguiendo la senda del Nikkei japonés, que cerró con pérdidas del 10,5%, los inversores están refugiándose en bonos.
Para España, la distensión en el mercado de deuda ha coincidido con la subasta de letras a 12 y 18 meses en la que el Tesoro cumplió con sus expectativas. Las compras de los inversores españoles propiciaron que el rendimiento de los bonos a 10 años se moderara del 5,256 al 5,17 por ciento. Esta relajación situó a la prima de riesgo -el diferencial entre el bono español a 10 años y su homólogo alemán- en los 207 puntos básicos (ó 2,07 puntos porcentuales), frente a los 204 puntos básicos de ayer.
Sin embargo, la mayor huída de la bolsa en busca de bonos se produjo en Alemania. Después de que el Dax alemán cediera más de un 4,5%, el rendimiento de sus bonos cayó del 3,22% al 3,10%. El más bajo desde mediados del mes de enero.
Después de los alemanes, los inversores galos fueron los que más acudieron al mercado de deuda para protegerse de las caídas de más del 3% del Cac 40. Las compras de los inversores llevan al rendimiento de los bonos del 3,56 al 3.44%. Posteriormente, el rendimientos de los bonos británicos y los italianos también se han unido a los descensos. Los primeros se han relajado del 3,56 al 3,49%, mientras que los italianos se sitúan en estos moemntos en el 4,69&, frente al 4,77% de ayer.
