NUEVA YORK (Reuters) - Las potencias mundiales acordaron el viernes demorar la votación de nuevas sanciones contra Irán hasta finales de noviembre y la dejaron sujeta a los informes del organismo de control de la ONU y de un negociador de la Unión Europea (UE).
Los ministros de Exteriores de Estados Unidos, Rusia, China, Alemania, Francia y Reino Unido solicitaron al jefe de Política Exterior de la UE, Javier Solana, que mantenga más conversaciones con el negociador nuclear de Irán, Ali Lariyani.
"Acordamos finalizar un texto para una resolución de sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU (...) con la intención de llegar a una votación (...) a menos que los informes de noviembre del doctor Solana y del (jefe del OIEA) doctor (Mohamed) ElBaradei, muestren un resultado positivo de sus esfuerzos", señaló un comunicado conjunto.
Un diplomático europeo involucrado en el proceso lo describió como "una victoria de la unidad sobre la precipitación".
Hablando mientras las principales potencias se reunían en otra parte de Nueva York, el ministro de Exteriores de Irán dijo desafiantemente que las sanciones no cambiarían lo que describió como la política nuclear "racional" de Teherán.
Alemania, el mayor socio comercial europeo de Irán, está entre dos aguas, al insistir en que mayores sanciones deben estar dentro del marco de la ONU y a condición de evitar el uso de fuerza militar contra la república islámica.
/Por Arshad Mohammed y Evelyn Leopold/.*.
