El 90% de las revisiones de los precios objetivos de los analistas son negativas o neutrales. Se prevé una recogida de beneficios en el sector, que acumula avances de doble dígito en 2011.
Ni el paréntesis de la crisis de la deuda soberana lo ha impedido. El sector bancario sigue suscitando las dudas de la media de analistas que recoge FactSet, y así lo reflejan las revisiones sobre su valoración: todas se han deteriorado sustancialmente, hasta el punto de que la suma de las revisiones de precios objetivos a la baja y las neutrales constituye el 90% del conjunto de las efectuadas en los dos últimos meses por el consenso de mercado.
¿Qué están descontando la media de bancos de inversión? Por un lado, indudablemente, la exposición al sector inmobiliario. Por otro, el inminente arranque de la reestructuración de las cajas de ahorros, que en ocho meses deben recapitalizar y depurar los excesos pasados de estas entidades financieras a través del mercado bursátil, lo que supone más cantidad de papel en el parqué... y la incertidumbre de si los bancos entrarán en el capital de las cajas.
Nuria Álvarez, de Renta 4, explica que el sector financiero se está moviendo en un escenario de gran competitividad, y la incorporación de las cajas reconvertidas implicaría una lucha más encarnizada por mantener o captar cuota de mercado: "La incertidumbre sobre la nueva financiación por crédito resta visibilidad a la recuperación de los bancos en volúmenes. Cuando el proceso finalice, nadie dirá que los bancos viejos han perdido cuotas frente a los nuevos".
Banesto, el más castigado
La entidad financiera que acumula mayor número de revisiones negativas es Banesto: dos tercios de los analistas que siguen su evolución han empeorado su precio objetivo, que la media de bancos de inversión fija en 7,35 euros. Esta entidad ostenta una recomendación de mantener por parte del consenso, recomendación que sólo comparte con BBVA y Santander: el resto son un vender.
Junto con Banesto, son precisamente los dos pesos pesados son los que han acusado mayores rebajas. En ambos casos, más del 48% de casas de análisis que siguen su recomendación se recortaron sus valoraciones, que fijan en 10 euros para BBVA y 10,50 para Santander.
Más exigencia en los mercados
Esta visión negativa del consenso no había encontrado, hasta el momento, correspondencia con su comportamiento bursátil. Si bien es cierto que el mercado se sigue mostrando exigente con los resultados que están presentando estas compañías, tampoco se puede ignorar el rebote espectacular del sector bancario: todas las entidades salvo Banesto, que avanza en torno a un 5% en 2011, acumulan subidas de dos dígitos desde sus mínimos de principios de enero. El más alcista es BBVA, que se anota un 23% en este periodo.
Este carrerón está teniendo otro efecto adverso sobre los bancos españoles: han perdido su potencial. La subida media que se prevé para el conjunto del sector es inexistente. El caso más alarmante es el del Banco Pastor, que ya está sobrevalorado en casi un 20%. En el lado positivo, es Santander quien atesora mayor potencial alcista, alrededor de un 15%.
Con la temporada de resultados a punto de acabar, (hoy ha presentado Popular un beneficio de 590 millones con cargo a 2010), a falta de lo que presente el Pastor el 11 de enero, "los bancos se quedan sin catalizador", según Nuria Álvarez. La analista advierte que, en este nuevo escenario, lo más previsible es "que se produzca una toma de beneficios, acompañada de cierta corrección".