
Nueva York, 7 ene (EFE).- La Bolsa de Nueva York comenzó hoy la quinta sesión de la semana pendiente de las palabras del presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, después de conocerse que el desempleo cayó en Estados Unidos hasta el 9,4%, lo que favoreció un avance inicial del 0,15% en el Dow Jones de Industriales.
Ese indicador, que agrupa a 30 de las mayores empresas que cotizan en Estados Unidos, dudó entre las subidas y las bajadas al comienzo de la sesión y media hora después de la apertura acumulaba un avance del 0,15% (17,64 puntos), para situarse en 11.714,95 enteros.
Por contra, el selectivo S&P 500 bajaba a esa hora un 0,1% (-1,24 unidades) para rondar los 1.272,61 puntos y el índice compuesto del mercado tecnológico Nasdaq retrocedía un 0,25%, ya que restaba 6,64 puntos y se colocaba en 2.703,25 enteros.
Los inversores mostraban así su prudencia ante los datos de empleo revelados antes del comienzo de la sesión, que indicaban que la tasa de desempleo de Estados Unidos cayó en diciembre al 9,4%, cuatro décimas menos que en el mes anterior y el nivel más bajo desde mayo del año 2009.
El dato del Departamento de Trabajo superó las previsiones de la mayoría de los analistas, que habían pronosticado que la cifra, o bien quedaría sin cambios, o caería sólo una décima.
La economía estadounidense creó 103.000 puestos de trabajo en el último mes del año pasado, por encima de los 71.000 creados en noviembre, pero aun así por debajo de las expectativas de los analistas, que preveían que se crearan unos 175.000 empleos.
Además, los observadores señalan que la caída de cuatro décimas no obedece sólo a que más gente haya encontrado trabajo, sino al hecho de que muchos estadounidenses han desistido en su búsqueda de empleo.
Para tratar de aclarar sus ideas, los inversores permanecían a esta hora muy pendientes de las palabras del presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, que daba su primera conferencia ante el nuevo Congreso estadounidense, donde los republicanos tienen un mayor protagonismo tras arrebatar a los demócratas el control de la Cámara de Representantes y varios escaños en el Senado.
En los primeros minutos de su intervención el responsable del banco central estadounidense ya apuntó que, en su opinión, el país no está creciendo lo suficientemente rápido como para reducir "de forma significativa" la tasa de desempleo, y defendió la necesidad de continuar con la compra de bonos de deuda pública, aunque en general parecía mostrarse más optimista que en ocasiones anteriores.
Mientras Bernanke hacía estas declaraciones, los 30 componentes del Dow Jones se debatían entre las subidas y las bajadas, estas últimas protagonizadas por las tecnológicas, que arrastraban descensos superiores al punto porcentual: Verizon perdía un 1,66%, AT&T un 1,1% y Microsoft un 1,04%.
También caía Alcoa (-0,65%) pese a haber anunciado que aumentaría su producción de aluminio y crearía 260 puestos de trabajo.
Las subidas en el Dow Jones las encabezaba el fabricante de maquinaria pesada Caterpillar, con un avance del 1,13%, y el grupo industrial 3M, que ascendía un 1,06%.
Fuera de ese índice destacaba el avance del 8,57% de la cadena de librerías Borders, después de que se publicara que está en negociaciones con Jefferies & Co. para reestructurar su deuda.
En otros mercados, la divisa estadounidense se fortalecía frente a otras como el euro, que se cambiaba por 1,2998 dólares, mientras que la deuda pública se encarecía y la rentabilidad de los bonos a diez años -que evoluciona en sentido opuesto- bajaba al 3,38%.