
El Banco de España dijo este viernes que constata en el cuarto trimestre una "ligera" mejora de la situación económica del país, gracias a una reactivación de la demanda, tras un crecimiento nulo en el tercer trimestre.
"Los indicadores referidos al último trimestre del año son todavía escasos, pero algunos de ellos sugieren que el gasto retomaría una senda de suave recuperación, tras las fuertes oscilaciones que presentó en los dos últimos trimestres, ligadas al impacto de diferentes medidas de naturaleza transitoria", afirmó el Banco de España en su boletín mensual.
España salió a principios de año de más de doce meses de recesión, con un crecimiento del 0,1% en el primer trimestre y del 0,3% en el segundo, gracias a la reactivación de la demanda, estimulada principalmente por la ayuda a los compradores de automóviles y la perspectiva de una subida del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA).
Esta último entró en vigor a principios de julio, en el mismo momento en que se terminaron las ayudas a la compra de vehículos, lo que provocó que en el tercer trimestre se estancara el crecimiento, lastrado por el retroceso de un 1,4% de la demanda nacional.
Según el Banco de España, el índice de confianza de los consumidores y de las empresas "muestra en la media de octubre y noviembre un nivel ligeramente superior al del tercer trimestre".
Para 2010, el Gobierno prevé un decrecimiento interanual del 0,3%, al igual que el Fondo Monetario Internacional (FMI), mientras que el Banco de España prevé un -0,4%. El Ejecutivo insistió en varias ocasiones en que no habría ningún trimestre negativo (respecto al anterior) este año.
En cuanto al empleo, punto débil de España, cuya tasa de paro sigue siendo la más elevada de la zona euro (alrededor del 20%), el Banco de España subraya un menor ritmo de destrucción de empleo en el tercer trimestre y destaca en octubre "una prolongación de esta tendencia hacia un menor deterioro del mercado laboral".
Pero también muestra una cifra inquietante: un 40% de los desempleados viven en hogares donde ninguna persona tiene trabajo. En 2007, el país registraba en este ámbito una de las tasas más bajas de la zona euro (26%). Ahora, supera su máximo de 1994 (37,7%).