NACIONES UNIDAS (Reuters) - Dos días de conversaciones entre Marruecos y el Frente Polisario sobre el futuro del Sahara Occidental terminaron el sábado sin que se lograra ningún acuerdo que ponga fin a la disputa de 32 años, aunque al menos sí aceptaron volver a verse.
Las negociaciones patrocinadas por la ONU, que se desarrollaron en Manhasset, cerca de Nueva York, son la segunda ronda desde que en abril ambas partes enviaran sus respectivos planes para una zona rica en recursos naturales.
El jefe de la delegación marroquí, el ministro del Interior, Chakib Benmoussa, dijo en una rueda de prensa que preferían no fijar una fecha porque su país celebrará elecciones en septiembre en las que se elegirá a un nuevo gobierno.
Benmoussa acusó al Polisario de no aprovechar la oportunidad para hacer progresos, y de "aferrarse a planes y propuestas que han demostrado ser inaplicables".
En este territorio de la costa noroeste de África viven unas 260.000 personas, a las que hay que sumar los refugiados saharauis que viven en campo en la vecina Argelia, y tiene lucrativos depósitos de fosfatos, ricos bancos de pesca y se cree que podría incluso tener petróleo.
El actual Gobierno español insiste en la necesidad de que se alcance una solución aceptada por ambas partes.