Madrid, 31 may (EFECOM).- El presidente del Banco Popular, Angel Ron, defendió hoy ante la Junta de Accionistas del banco la independencia de la entidad, si bien añadió que esta circunstancia no supone inmovilismo y, por lo tanto, "no es incompatible con estar abiertos a adquisiciones".
Ron, que presidió por primera vez la Junta de Accionistas del Popular, insistió, no obstante, en que el primer objetivo del banco es el crecimiento orgánico, antes de cualquier tipo de fusión, que, llegado el caso, no sería entre iguales, sino bajo el control efectivo del Banco Popular.
De todos modos y en respuesta a alguno de sus accionistas, el banco ha dejado claro que a día de hoy no se ha alcanzado ni está en vía de alcanzarse ningún acuerdo de estas características ni dentro ni fuera de España.
En los últimos 20 años se ha llevado a cabo un proceso de concentración en la banca española, que ha llevado a que de los 8 grandes bancos existentes hace dos décadas, siete se hayan integrado en dos grupos (el Santander y el BBVA).
Sólo el Popular, añadió Ron, "mantiene su independencia, característica distintiva del banco".
El presidente del Popular inició su discurso ante la Junta -en la que estuvo presente el 56 por ciento del capital social del banco- con un recordatorio para el fallecido Luis Valls y para su hermano, Javier, que dejó la presidencia de la entidad financiera hace unos meses.
Ron aseguró que los Valls han dejado su impronta en el banco, cuyo sello es el de la independencia, la prudencia y la calidad del servicio.
El presidente del banco insistió en que la mejor forma de defender la independencia del banco ante posibles opas es hacer bien las cosas y tener una buena gestión del negocio, lo que se traducirá en mejores resultados y en una eficiencia excepcional.
El Banco Popular, añadió, ha sabido adaptarse a un entorno de bajos tipos de interés y fuerte competencia, y ha respondido a ello con "un crecimiento rentable, equilibrado y sano".
Por su parte, el consejero delegado del banco, Francisco Fernández Dopico, destacó la importante labor realizada por la entidad en 2005, que ha logrado convertirse "en el banco del autónomo", con un claro liderazgo en pymes y con una fuerte penetración en el crédito directo.
Por su parte, el director financiero, Roberto Higueras, señaló que en España el crédito, sobre todo el hipotecario, ha subido por encima del ahorro, una situación que no se puede mantener siempre y para la cual el banco se ha preparado diversificando su cartera.
La Junta de Accionistas aprobó la modificación de los estatutos para adaptarlos a la presidencia única y a la nueva ley de sociedades anónimas, así como los resultados del ejercicio pasado -la entidad ganó de forma individual 605,9 millones de euros- y el reparto de 442 millones en dividendos.
Los accionistas también han aprobado la reelección de Price como auditor y la autorización para adquirir acciones propias hasta un límite del 5 por ciento del capital. EFECOM
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