
El Congreso de EEUU anunció este viernes haber alcanzado un acuerdo sobre la ley de reforma financiera, que será votada el próximo martes y firmada por el presidente Barack Obama.
Tras una maratoniana sesión de 20 horas, que se prolongó durante toda la noche, delegados del Senado y de la Cámara de Representantes llegaron a un acuerdo sobre la reforma financiera más importante en EEUU desde el 'crash' bursátil de 1929, que busca una reestructuración en Wall Street y una transparencia de las operaciones bancarias, para evitar otra crisis financiera.
El acuerdo sobre la imposición de restricciones a las operaciones por iniciativa propia de la banca y que aumenta el control sobre el mercado de derivados deberá ahora ser votada el martes y luego ratificada por el presidente estadounidense.
Los parlamentarios pretendían llegar a un acuerdo antes de que el presidente Obama viajara a Canadá para la cumbre del G-20 y G-8.
El acuerdo fue aprobado por 20 votos a favor y 11 en contra en la Cámara de Representantes y siete favorables y 5 contrarios en el Senado.
La reforma impulsada por Obama estuvo en los últimos meses bajo fuerte presión del sector bancario en Wall Street y debió sortear varios obstáculos, hasta que fue aprobada por el Senado el 20 de mayo. Luego, demócratas y republicanos debieron conciliar opiniones antes de alcanzar el texto final.