MOSCU, 24 (EUROPA PRESS)
El alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior y la Seguridad Común (PESC), Javier Solana, pidió a Moscú poco antes del inicio de la cumbre de Sochi (Mar Negro) entre la UE y Rusia una "cooperación más cercana" para convertir la energía en un "factor de estabilidad e integración en el continente europeo".
En una entrevista concedida a la agencia Ria Novosti, Solana apeló a la necesidad de "asegurar el suministro y la seguridad de los consumidores, además de las bases para la cooperación económica". Para lograr un mejor entendimiento en materia de seguridad, pidió "transparencia, apertura a la competencia y acceso equitativo a las inversiones, los mercados y las infraestructuras, así como cooperación ambiental".
La energía es uno de los asuntos más destacados en la agenda de la cumbre de hoy. La UE intenta asegurarse el suministro tras el conflicto sobre los precios del gas entre Rusia y Ucrania durante el invierno y su incidencia en el resto de Europa. Además, el Gobierno ruso ha denunciado el recelo de Europa Occidental ante los planes europeos de expansión de Gazprom y Alemania trabaja con Moscú en la construcción de un gasoducto que garantice el suministro.
"Para la UE, la cooperación energética es parte natural de la política exterior y de seguridad tratada con los socios clave", explicó Solana, que recordó que la UE es el mayor mercado de exportación de energía para Rusia. De hecho, Rusia suministra alrededor del 25% del consumo de gas y petróleo de la UE, mientras que los europeos absorben el 75% de las exportaciones energéticas rusas.
La UE insistirá hoy en la necesidad de que Rusia ratifique el Tratado de la Energía y el Protocolo de Tránsito, aunque no espera grandes resultados porque las negociaciones reales se iniciarán probablemente el año que viene en el marco de la revisión del Acuerdo de Asociación y Cooperación entre la UE y Rusia.
El Ejecutivo comunitario pretende que la revisión de los acuerdos energéticos con Rusia tengan en cuenta la previsible adhesión del país a la Organización Mundial del Comercio (OMC), lo cual facilitaría un mayor comercio y más integración económica entre ambos bloques.
Junto a la cuestión energética, está previsto que las delegaciones de ambas partes firmen un acuerdo de repatriación de los inmigrantes irregulares rusos y de facilitación de visados para determinadas categorías como estudiantes o funcionarios. Además, según señalan hoy los medios rusos, Moscú aprovechará la ocasión para reivindicar los derechos de las minorías rusas en los países bálticos.