
Las aseguradoras, caracterizadas por el conservadurismo que posee en su estilo de inversión, comienzan a tomar en cuenta la idea de incrementar su participación en hedge funds.
La naturaleza de retorno absoluto que tienen para algunos y su aproximación a mercado para otros, reclama este tipo de inversores. Aunque el volumen invertido por las aseguradoras en estos fondos es reducido, la filosofía conservadora y de control de riesgo que poseen es congruente con la premisa de los gestores de hedge de reducir o aislar el riego de mercado.