
Puede que Grecia tan sólo sea un dedo meñique en el conjunto de la Eurozona pero las rebajas de rating que ha sufrido el país helénico, primero de Moody´s y luego de S&P, han hecho mucha sangre a la moneda única. Y, ¿quién se ha aprovechado de esto? Pues su gran competidor en el mundo de las divisas: el dólar.
El billete verde ha experimentado esta semana su mayor apreciación semanal desde el 10 de abril, al subir un 2,13%. Ayer, por cada euro se pagaban 1,4341 dólares, sus mínimos desde septiembre, frente a los 1,5005 que se abonaban hace tan sólo 19 días.
De esta manera, la divisa americana acumula una revalorización en diciembre del 5,12% loquerecorta la apreciación del euro en el año hasta el 2,42%. La duda es ¿el rebote del dólar ha sido sólo un oasis en el desierto en el que está desde que el 25 de noviembre tocara mínimos anuales? Todo dependerá, una vez más, del sentimiento del inversor. "El mercado ve al dólar como divisa de refugio en tiempos de estrés y lo venden cuando la volatilidad cae", afirman en Schroders.
Es decir, el inversor le da la misma utilidad que al oro. Un metal que aunque hasta ahora, ha contado con el monopolio como activo refugio, esta misma semana ha visto el peligro de ser destronado por el billete verde. Dehecho, el precio de la onza ha caído un 1,08% en las últimas cinco sesiones. Todo lo contrario ha sucedido con el petróleo. El barril de Brent, de referencia en Europa se ha apreciado un 2,49% hasta los 73,78 dólares.
Una semana más sin más
En cuanto a los mercados de renta variable, la semana ha sabido más bien a poco. Es cierto que la cuádruple hora bruja - vencimiento de futuros y opciones trimestrales sobre índices y acciones- incrementó el volumendel mercado español considerablemente hasta 10.794 millones de euros, pero nada más. El Ibex cerró sesión con un retroceso del 0,44 % hasta 11.645 puntos, lastrado por el sector financiero, a quien no sentó bien el endurecimiento de las normas de Basilea.
De esta manera, en la semana, el principal índice español se apunta un 0,25 %. En este periodo, ha habido un claro sector protagonista: el de las televisiones. El jueves se conocía que Antena 3 estaba negociando una fusión con la Sexta y que Telecinco hablaba de lo mismo con Cuatro (el viernes se confirmó la fusión de estas dos últimas). La respuesta del parqué fue unánime: comprar.