
Madrid, 15 oct (EFE).- El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, ha asegurado hoy que las negociaciones entre el Gobierno, Opel y la compañía Magna siguen abiertas y "van razonablemente bien".
Corbacho ha confiado en que se llegue a un acuerdo para mantener la planta de Figueruelas y "preservar al máximo" los puestos de trabajo de dicho centro.
No obstante, Corbacho ha señalado que el ajuste de la plantilla en la fábrica de Figueruelas es "necesario" y "seguramente se tendrá que hacer".
Asimismo, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, también ha advertido hoy a la multinacional Magna de que "no olvide" que la planta de Figueruelas representa el 40% de la producción y venta de esta compañía del automóvil en Europa, por lo que si todavía no se ha llegado a un acuerdo es porque "España y Figueruelas no son cualquier cosa".
Corbacho y Méndez han realizado estas declaraciones antes y después de participar en el seminario "La estrategia de Lisboa: balance y perspectivas", organizado por UGT.
El ministro de Trabajo ha afirmado ante los periodistas que aunque las negociaciones las lleva el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, "las cosas van razonablemente bien", pero habrá que esperar a que finalicen las reuniones.
"Estoy convencido de que todo el trabajo va encaminado a conseguir el objetivo de mantener una empresa que es de las más competitivas en Europa", aseveró.
Por su parte, Méndez ha lanzado un mensaje de "reflexión" a la compañía Magna ante las críticas de que la planta de Opel en España sea la última en cerrar un pacto y ha dicho que si es así es porque los "planteamientos actuales no convencen", y ha advertido de que Magna "no debe olvidar" que Figueruelas es el "pilar fundamental" para el futuro de Opel.
"Magna debe atender a esta realidad, que no es cualquier cosa", apostilló.