Palma, 10 ago (EFE).- El propietario del bar-cafetería Nica, Fructuoso Nieto, ha informado hoy a los periodistas concentrados ante su establecimiento -en el que la Policía Científica investiga un posible cuarto atentado de ETA- que los agentes descartan que se trate de acumulación de gas metano, como se creyó en un principio.
Nieto está desde primera hora de la mañana en la puerta de su establecimiento a la espera de que los tres agentes de la Policía Científica que se encuentran en su interior le confirmen si la explosión que tuvo lugar ayer en el sótano del local -donde están los baños y la cocina- fue debida a un artefacto colocado por ETA.
La explosión en el bar Nica se produjo ayer a las 12.00 horas, por lo que, de acuerdo con el aviso de ETA, sería el primero de los atentados que la banda perpetró en otros tres puntos de la ciudad (dos en restaurantes el Paseo del Portitxol y otro en los bajos de la plaza Mayor) sin causar heridos en ninguno de ellos.
Sin embargo, los daños materiales en el caso del bar Nica han sido "numerosos", por lo que durante esta mañana varias personas han comenzado a retirar los escombros que provocó la explosión.
Los tres agentes de la Policía Científica continúan en el interior del local tratando de averiguar en dónde se produjo concretamente el estallido -si en el baño de señoras, como en las otras tres explosiones, o en el de hombres-, pues el sótano, según ha apuntado el propietario del bar, ha quedado "destrozado".
ETA avisó ayer sobre las 11.30 horas en varias llamadas telefónicas grabadas de una voz femenina distorsionada y difícilmente comprensibles de la explosión de varios artefactos en restaurantes de Palma entre las 12.00 y las 18.00 horas, según informó ayer el delegado del Gobierno en Baleares, Ramón Socías.
Estas llamadas fueron recibidas, según apuntó, por los Bomberos de Calvià, radio-taxi Guipúzcoa y un político de la Junta de Andalucía.
