El Banco de Inglaterra (BoE) anunció la inyección en la economía de otros 50.000 millones de libras (84.000 millones de dólares) durante su reunión de política monetaria celebrada este jueves, en la que también decidió mantener su tipo de interés principal en el 0,5%.
"En el Reino Unido la recesión parece haber sido más profunda de lo que se había anticipado", señala la institución, destacando la caída del Producto Interior Bruto (PIB) en el segundo trimestre. El BoE también insiste en la fragilidad del sistema financiero y del repunte de la confianza de los hogares y empresas.
"Aunque hay señales que muestran que las condiciones en el mercado del crédito empezaron a mejorar, los préstamos en las empresas disminuyeron y las tasas de los bancos siguen siendo muy elevadas", señala el documento. En consecuencia, el Banco decidió mantener sin cambios su tasa históricamente baja de 0,5%.
"El Comité también votó continuar con su programa de adquisición de activos financiados por reservas del banco central y aumentar su monto en 50.000 millones, hasta los 175.000 millones de libras (294.000 millones de dólares)", agregó el comunicado.