Madrid, 30 jul (EFE).- La Bolsa española, y particularmente su principal indicador, el Ibex-35, podría haber agotado el rebote alcista que comenzó a finales de marzo aunque la tendencia del mercado es ya claramente positiva, según el departamento de análisis de Bankinter.
El director del departamento de análisis de la entidad, Ramón Forcada, recordó, en encuentro con periodistas, que la economía española está en plena recesión, lo que inevitablemente tendrá un reflejo en la evolución del mercado de renta variable.
No obstante, señaló que el crecimiento esperado de los beneficios de las cotizadas del Ibex ha pasado, según las estimaciones del banco, del 1,5 al 10,8 por ciento para 2009, y del 16,5 al 19,4 por ciento para 2010.
Además, las bolsas están muy "correlacionadas", por lo que las incipientes buenas perspectivas de la economía estadounidense y su efecto en Wall Street deberían tener también consecuencias en el mercado de valores español.
El selectivo español, añadió, "va mejor de lo que cabría esperar" debido a que las compañías con mayor peso en el índice tienen gran parte de sus intereses fuera de España, por lo que el Ibex no refleja con precisión el estado de la economía nacional.
Por ello, el analista insistió en que "lo arriesgado ahora es estar fuera de la Bolsa", pese a que persisten riesgos como un repunte del precio de las materias primas, sobre todo del petróleo, así como una subida de impuestos.
En el caso de España, existe además el riesgo añadido de las emisiones de deuda pública, que superarán a las compras por parte de los bancos centrales.
Forcada indicó que la economía española es la más débil de la zona del euro, no tanto por la contracción del PIB sino por la "alta sensibilidad de la estructura económica española" a una tasa de crecimiento inferior al 2 por ciento, que históricamente produce un aumento del paro.
Ello es así, explicó Forcada, por el fuerte peso de los sectores inmobiliario y de la construcción y del turismo en el Producto Interior Bruto, que ha llegado a ser del 18 y del 15 por ciento, respectivamente.
BANKINTER (BKT.MC)cree que la recuperación de la economía española se demorará un año más que en el resto de la zona del euro, y no llegará hasta finales de 2011 e incluso 2012, particularmente en lo que se refiere al empleo.
Para este año calculan una contracción económica de hasta el 3,5 por ciento con una tasa de paro de hasta el 22 por ciento.