Al cierre de la jornada de hoy viernes el Índice Nikkei de la Bolsa de Tokio finaliza una semana donde lo más destacable ha sido la reacción alcista formada tras el alcance de la zona de antigua resistencia y ahora soporte de los 9500 puntos.
El hecho de que las caídas se hayan visto frenadas en ese entorno, invita a pensar en que éstas podrían haber sido un simple pull back a la clavicular de la amplia figura de vuelta alcista que semanas atrás se confirmaba en el índice y que, recordemos, tiene como objetivos mínimos de subida entornos de 13.000 enteros.
La semana nos ha dejado una línea de vela potencialmente alcista que se conoce como martillo. Decimos potencialmente puesto que para que se confirmen sus implicaciones de giro es imprescindible que la presión compradora logre la semana que viene el Índice Nikkei cierre por encima de resistencias de 9880.
Esto es el origen del último segmento bajista de corto y su superación nos avisaría de que lo más probable es que la tendencia que desarrolla el índice a lo largo de los últimos meses se estaría reanudando.