Vigo, 23 jun (EFE).- Los representantes de las tres centrales sindicales (CIG, CCOO y UGT) y la patronal del sector metalúrgico de la provincia de Pontevedra han comenzado hoy una nueva reunión, con el incremento salarial como principal escollo.
El encuentro se inició pasadas las 17:00 horas en el edificio administrativo de la Xunta, con la patronal en la segunda planta y los sindicatos en la cuarta.
Esta fórmula de negociación por separado la llevan adelante el jefe de Inspección Laboral, José María Casas de Ron, el presidente del Consello Galego de Relaciones Laborales, Demetrio Fernández, el director de la Inspección Laboral en Galicia, Carlos Domenech, y la propia delegada territorial de la Xunta, Lucía Molares.
El incremento salarial continua siendo la principal diferencia entre las partes en esta negociación en la que ayer la patronal puso encima de la mesa una nueva oferta con un convenio colectivo por tres años.
Los sindicatos, tras conocerla, advirtieron a los empresarios que un convenio colectivo por tres años sólo se lo plantearían si lleva consigo incrementos salariales "jugosos" que, hasta la fecha, no se han dado.
El portavoz de los empresarios, Enrique Mallón, explicó que la oferta de la patronal pasa por un convenio a tres años, con una subida de 1,9 por ciento en 2009, mientras que en 2010 y 2011 sería una subida en principio de 0,5 más IPC, pero con posibilidad esos dos años de incrementar "unas décimas".
Los responsables de los tres sindicatos rechazaron esa oferta tal y como la plantea la patronal y coincidieron en afirmar que sólo la estudiarían si se pusieran encima de la mesa incrementos salariales importantes para los tres años de vigencia.
El convenio del metal en la provincia de Pontevedra afecta a unos 27.000 trabajadores y hoy la huelga cumple su decimoquinta jornada con paro total en las empresas sin convenio propio.
