El precio de las materias primas, especialmente el petróleo, ha dado un respiro en su senda alcista iniciada a finales de abril, fecha desde la cual la cotización del Brent acumula un 45 por ciento de revalorización, llevando al futuro de septiembre a cotizar por encima desde los 70 dólares. A nivel global, la moderación en el precio del crudo proporciona cierto alivio en el camino hacia la recuperación, alejando los riesgos de que terminemos en una situación de recesión con tensiones inflacionistas. El papel de los banqueros ya es complejo.