
Berlín, 20 may (EFE).- La canciller alemana, Angela Merkel, se ha reunido con varios de sus ministros para analizar la estrategia a seguir en la crisis de Opel, al vencer hoy el plazo dado a los potenciales inversores para presentar sus planes detallados.
En la reunión participaron, según fuentes gubernamentales, el ministro de Economía, Karl-Theodor zu Guttenberg, el de Finanzas, Peer Steinbrück, el de Trabajo, Olaf Scholz, así como el vicecanciller y titular de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier.
Un portavoz de Guttenberg no quiso de momento dar informaciones sobre el contenido de la reunión y afirmó que se había acordado mantener silencio al respecto.
Se desconoce por tanto si en la reunión se estudiaron ya los planes de viabilidad, para los que las empresas interesadas tenían plazo hasta las 18.00 h (16.00 GMT) de hoy.
En concreto se esperan planes detallados del fabricante italiano de automóviles Fiat y del productor de componentes austríaco-canadiense Magna, pero también del inversor estadounidense Riplewood.
Guttenberg había adelantado el lunes que si alguno de los planes presentados convencía al gobierno, era posible que una delegación gubernamental viajara todavía esta semana a Estados Unidos para negociarlo con la casa matriz General Motors, y su principal acreedor, el Estado.
El gobierno alemán ha propuesto un modelo de financiación transitoria para salvar los activos europeos de una eventual suspensión de pagos de la casa matriz, lo que en Europa prácticamente se da por hecho.
El modelo contempla la creación de una entidad fiduciaria que administraría el negocio mientras se ultiman los detalles con el inversor que haya ganado la puja.
Guttenberg ha asegurado, sin embargo, que esta solución tan sólo se plantea en el caso de que haya una oferta que convenza, y no quiso excluir una suspensión de pagos de Opel.
Según informaciones del diario económico "Handelsblatt", el Gobierno alemán y los bancos han llegado ya a un acuerdo de financiación transitoria para el caso de que el asunto prospere, que consiste en ofrecer a Opel un crédito de 1.500 millones de euros para los próximos seis meses, que avalarían a partes iguales el Estado y los Länder.
El problema hasta ahora es, según la prensa alemana, que Estados Unidos y General Motors han mostrado poco interés en el modelo alemán.