Washington, 29 abr (EFE).- El presidente y consejero delegado de Chrysler, Bob Nardelli, confirmó hoy a sus empleados que el Departamento del Tesoro ha llegado a un acuerdo provisional con los acreedores del fabricante para eliminar 6.900 millones de dólares de deuda.
Nardelli aseguró en un correo electrónico enviado a los trabajadores que los acreedores cancelarán los 6.900 millones de dólares de deuda de la empresa a cambio de 2.000 millones de dólares en efectivo.
"Si es aprobado, eliminará un significante obstáculo" de cara a evitar la quiebra de Chrysler, afirmó Nardelli en su misiva.
El fabricante tiene de plazo hasta el 1 de mayo para finalizar acuerdos de reestructuración de su deuda, operaciones y costes laborales. Si no lo consigue, se tendrá que declarar en suspensión de pagos.
Pero el ejecutivo también advirtió que el acuerdo tiene que ser aprobado por todos los acreedores.
Nardelli también se refirió al acuerdo provisional alcanzado con el sindicato United Auto Workers (UAW) y que está siendo ahora votado por sus afiliados.
"Esta es otra importante parte de nuestro esfuerzo para reestructurar costes y alcanzar viabilidad. Es evidente que nuestras actividades de reestructuración y reducción de costos están produciendo resultados", afirmó Nardelli.
El acuerdo, alcanzado en la noche del domingo, supondrá que UAW se haga con el 55 por ciento del accionariado de Chrysler. El resto se repartiría entre el fondo de inversiones Cerberus (el actual propietario), el Gobierno estadounidense y la italiana Fiat.
El directivo dijo que continúan las conversaciones con Fiat para formar una alianza que "proporcionará muchas ventajas estratégicas" y que ayudará a Chrysler "a asegurar el éxito a largo plazo".
