El sistema financiero español sigue siendo "muy sólido" pese a la intervención de Caja Castilla-La Mancha (CCM), cuyos fondos están absolutamente garantizados, y en este momento no preocupa la situación de ninguna otra entidad, afirmó este lunes el ministro de Economía, Pedro Solbes.
En varias entrevistas con radios y televisiones, el vicepresidente segundo del Gobierno dijo que los clientes de CCM pueden sacar su dinero sin ningún problema si lo necesitan para algo. Pero, si no, les aconsejó lo siguiente: "Déjenlo donde está, porque tampoco tendrán problemas". Sobre las causas de la intervención, Solbes habló de "una gestión inadecuada en el sentido de que la caja no ha sido suficientemente cauta a la hora de invertir en el sector de la construcción".
El titular de Economía opinó que la intervención de CCM es algo "menor", pero que no convenía esperar a hacerla. Solbes aseguró que en España no hay ahora ninguna otra entidad en situación similar a la caja manchega y que el sistema financiero español puede "seguir sacando pecho" por su fortaleza. Aunque admitió que, si la situación económica empeora, no puede descartarse otra actuación, pues ningún sistema es "inmune".
El secretario de Estado de Economía, David Vegara, señaló que la intervención de CCM "supone menos del 1% del sistema", una diferencia reseñable comparada con las medidas de choque tomadas en otros países. Fuentes del Gobierno aseguraron este lunes que la intervención no debilitará la posición de España en la próxima cumbre del G-20, sino que pondrá "en valor" el sistema financiero español.
"Las entidades financieras españolas han demostrado una resistencia bien reconocida" y la actuación en CCM "no va a suponer una menor resistencia", según las fuentes, pues el sistema financiero español, aunque no sea inmune, es "solvente". España, que acude como invitada a la cumbre del 2 de abril en Londres, defenderá "la regulación y la supervisión financiera", el papel que sector público e instituciones financieras internacionales deben desempeñar "en los países más vulnerables", detalló Vegara.
Por su parte, el presidente de CASTILLA (CAS.MC)La Mancha, José María Barreda, transmitió un "mensaje de tranquilidad y confianza" a los clientes e impositores de CCM, asegurando que "después de la intervención no existe una entidad bancaria más segura". Barreda también lamentó los supuestos ataques a la caja. "No hay entidad financiera que aguante esta campaña de descrédito sobre su solvencia", dijo. El Banco de España, avalado por el Gobierno, decidió tomar el domingo el control de CCM, en el primer rescate público de una entidad financiera española desde el inicio de la crisis.
CCM "es solvente, su patrimonio neto es positivo, no hay ningún agujero financiero, pero afronta problemas de liquidez que sólo pueden ser resueltos a través de la financiación del Banco de España", afirmó Solbes el domingo en rueda de prensa tras una reunión extraordinaria del Consejo de Ministros, reunido de urgencia para aprobar un decreto que permitía avalar el dinero que el Banco de España decida inyectar en CCM, tras su decisión del sábado de sustituir a su cúpula directiva por tres administradores, e inyectarle capital.
CCM es solvente, "pero tanto la situación de su capital regulatorio como sus perspectivas financieras aconsejaban buscar soluciones que garantizaran su futuro", dijo el Banco de España en un comunicado. El banco central reconoce que su decisión de actuar ha llegado después del fracaso de las negociaciones para la fusión de CCM con la caja andaluza Unicaja, percibido como el primer intento de salvamento de la caja manchega.
El Gobierno aprobó el domingo un decreto por el que se autoriza "el aval del Estado por el importe que el Banco de España considere necesario sin que pueda superar los 9.000 millones de euros", dijo Solbes. El ministro reconoció que se trata de una previsión máxima, ya que el monto a inyectar por el Banco de España estará en torno a los 2.000 ó 3.000 millones de euros.
Solbes insistió en que el caso de Caja Castilla-La Mancha, nacida en 1992 de la fusión de otras cuatro cajas de ahorros, es "aislado", que representa menos del 1% del sistema financiero español y que "no hay ninguna otra entidad en estas circunstancias". "Las cajas como el resto del sistema financiero son sanos y sólidos", pero si la crisis sigue generando "problema de liquidez nadie es inmune a largo plazo", matizó el ministro.
Tanto Solbes como la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, lanzaron un mensaje de tranquilidad a los clientes de la entidad asegurando que "el Banco de España y el Gobierno garantizan sus ahorros y sus depósitos". El caso de CCM supone la primera intervención de una gran entidad financiera española desde el inicio de la crisis y desde que en 1993 el Banco de España asumiera el control del Banco Español de Crédito (Banesto), que adquirió posteriormente en subasta el grupo Santander.
Los grandes bancos españoles se han visto hasta ahora relativamente poco afectados por la crisis financiera, aunque había ciertas preocupaciones respecto a las cajas de ahorros regionales, especialmente por su exposición al estallido de la burbuja inmobiliaria española.
Según el diario El Mundo, citando documentos internos del Banco de España, CCM podría haber concedido demasiados créditos a promotores inmobiliarios locales de difícil recuperación. Según informaciones de prensa, CCM había dado créditos por 19.536 millones de euros a finales de 2008 y tenía unos depósitos de clientes de 17.265 millones de euros, asegurados por el Fondo de Garantía de Depósitos.