
Seúl, 10 feb (EFE).- La bolsa de Seúl cerró hoy con su segunda caída consecutiva, que le llevó a situarse por debajo de los 1.200 puntos, presionada por la venta de inversores extranjeros en los sectores electrónico y siderúrgico.
El Kospi cayó 3,82 puntos, 0,32 por ciento, y concluyó la sesión en las 1.198,87 unidades.
Los inversores extranjeros vendieron acciones por primera vez desde el 23 de enero para la toma de beneficios.
Los sectores electrónico y siderúrgico cedieron alrededor del 1 por ciento, frente a las ganancias de la maquinaria (3,96 por ciento) y las constructoras (0,85 por ciento).
El descenso fue generalizado en los principales títulos surcoreanos, como Samsung Electronics, que perdió un 1,33 por ciento.
La siderúrgica POSCO y Hyundai Motor también bajaron un 0,89 por ciento y un 0,19 por ciento, respectivamente.
En cambio, el indicador de valores tecnológicos Kosdaq aumentó 3,43 puntos, 0,91 por ciento, para situarse en los 380,26 puntos.
La divisa surcoreana, el won, se depreció 1,9 puntos frente al dólar estadounidense y finalizó la sesión en los 1.382,9 wones.