LA HAYA (Reuters) - El Gobierno de Holanda anunciará el lunes su dimisión en medio de una crisis por los recortes presupuestarios, informaron dos canales de televisión, lo que pondría fin a una coalición que había respaldado con fuerza un pacto fiscal de la Unión Europea y que dio lecciones a Grecia sobre cómo mantener las finanzas en orden.
El primer ministro Mark Rutte presentará la renuncia de su gabinete, que depende del populista Partido de la Libertad para legislar en el Parlamento, cuando se reúna con la reina Beatriz, informaron RTL y NOS. La renuncia del gabinete despejaría el camino hacia nuevas elecciones.
Los ministros declinaron comentar cuándo abandonarían el gabinete. Sin embargo, el revuelo político en el que es tradicionalmente uno de los miembros más estables y prósperos de la zona euro golpeó a los mercados financieros, ya preocupados sobre la probabilidad de una victoria socialista en las elecciones presidenciales francesas.
La crisis explotó el fin de semana cuando el Partido de la Libertad, contrario a la Unión Europea, no quiso llegar a un acuerdo con la coalición de centroderecha sobre la manera de recortar entre 14.000 y 16.000 millones de euros del presupuesto y reducir el déficit holandés para llevarlo al objetivo de la UE el próximo año.
"Asumo que es inevitable", dijo el viceministro de Asuntos Exteriores, Ben Knapen, al programa de noticias RTL Z.
"Es importante que todos quienes tenemos responsabilidad mantengamos la calma y logremos tener un presupuesto ordenado. Si no, tendremos grandes problemas", agregó Knapen antes de entrar a una reunión de gabinete.
Se podrían convocar elecciones el mismo lunes y probablemente se realicen en septiembre u octubre, dijeron los analistas consultados.
Rutte y el ministro de Finanzas, Jan Kees de Jager - quien voló de urgencia desde la asamblea del FMI en Washington cuando se desató la crisis - han estado entre los más severos críticos de los países "pecadores presupuestarios" como Grecia y Portugal.
El fracaso de Rutte, cuya coalición ha estado en el poder desde octubre de 2010, para lograr un acuerdo destinado a reducir el déficit del próximo año hasta el techo exigido por la UE de un 3 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) generó fulminantes comentarios en Bruselas.
"Primero tienes una boca bien grande para los que incumplen los presupuestos y después tú mismo no puedes cumplir, y en vez de eso tienes que convocar nuevas elecciones apenas un año y medio después de que asumiera el nuevo Gobierno", dijo un diplomático en Bruselas.
Los inversores salieron a vender bonos de Holanda y de los países de la periferia de la zona euro el lunes, cuando los rendimientos de emisores de deuda como España se situaban por encima el 6 por ciento.
"Nuestra competitividad, credibilidad y estatus AAA están en riesgo (...) Eso es muy costoso. La tasa de interés de nuestros bonos estatales pueden dispararse", dijo el ex ministro holandés y actual comisario europeo, Neelie Kroes, al diario De Telegraaf.
El costo de asegurar deuda holandesa contra la moratoria subió a su nivel más alto desde enero, de 128 puntos base.
"Esto representa un posible escollo considerable al ya complicado pacto fiscal", dijo Rabobank en una nota.