ROMA (Reuters) - El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, pidió el jueves a los diputados que le apoyaran con una moción de confianza para demostrar que aún tiene mayoría parlamentaria, advirtiendo de una crisis catastrófica y de elecciones anticipadas si el Gobierno perdiera la votación.
Berlusconi dijo a los diputados que su gobierno de coalición de centroderecha está unido a pesar de "algunos accidentes por el camino" y que Italia sigue comprometida con lograr el equilibrio presupuestario en 2013.
No hay una alternativa creíble para su gobierno, y unas elecciones anticipadas no solucionarían los problemas de un país enfangado en la crisis de deuda de la eurozona.
Presionado por el presidente, además del gobernador del banco central, para demostrar que puede hacer frente a la variedad de problemas sociales y económicos, Berlusconi dijo que confiaba en superar la moción de confianza, prevista para el viernes.
El primer ministro señaló además que su coalición estaba unida a pesar de "accidentes" ocasionales, como la derrota en la votación parlamentaria el martes que desató la más reciente de las crisis y reiteró su promesa de equilibrar el presupuesto de aquí a 2013.
En lo que supuso un respaldo a la coalición de gobierno, Umberto Bossi, líder de la Liga del Norte, dijo que Berlusconi era convincente y pronosticó la victoria del Gobierno en la votación.
Algunos analistas opinaron que incluso si gana la moción de confianza, Berlusconi quedará demasiado dañado y que será cuestión de meses antes de que aparezca la siguiente crisis. Agregaron que probablemente se celebren elecciones anticipadas el próximo año, un año antes de lo previsto.
La mayoría de los partidos de oposición se ausentaron para el discurso de Berlusconi pero después volvieron para el debate y dejaron claro que votarán en contra del primer ministro el viernes.
Berlusconi convocó la moción de confianza después de que la coalición sufriera una derrota embarazosa el martes cuando no consiguió la aprobación de una provisión presupuestaria rutinaria.
Un número de partidos de centro derecha estuvieron ausentes en esa votación, causando sospechas de que algunos disidentes no acudieron deliberadamente para enviar un mensaje al primer ministro sobre las diferencias que existen dentro de la coalición.
