BASILEA, Suiza (Reuters) - El crecimiento económico se está desacelerando pero no hay señales de una recesión mundial, según los gobernadores de algunos bancos centrales reunidos en Basilea.
Los bancos centrales están listos para proporcionar liquidez en caso de que sea necesario y no hay indicios de deflación en los países desarrollados, indicó Jean-Claude Trichet, que preside el encuentro en el Banco Internacional de Pagos.
"No vemos una recesión pero sí vemos una desaceleración en comparación con lo observado en el período más reciente", dijo el presidente del Banco Central Europeo durante una rueda de prensa.
Los mercados de valores caían el lunes y las acciones europeas se situaban en torno a los mínimos de 26 meses, en parte por la reacción a la incapacidad del G-7 de ofrecer más que un comunicado sobre su compromiso con los esfuerzos por levantar la economía.
El temor en torno a un impago griego ha crecido después de que algunos miembros de la coalición del gobierno de Angela Merkel hablaran abiertamente sobre esa posibilidad.
La dimisión de Juergen Stark del BCE añadió tensión por las señales de división en el seno de la entidad por su política en torno a Grecia.
Mientras tanto, Atenas ha comunicado que sólo tiene liquidez para unas pocas semanas.
Trichet ha instado a los responsables de política a aplicar rápidamente las decisiones adoptadas, incluyendo las del 21 de julio, para proporcionar a Grecia un segundo rescate.
Los prestamistas internacionales amenazaron la semana pasada con retener el sexto pago del rescate de 8.000 millones de euros por los desvíos fiscales helenos. Trichet dijo que se trabajaba con la idea de que Grecia iba a satisfacer los criterios de los inspectores de la UE y el FMI.
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