DEHIBA, Túnez (Reuters) - Rondas de artillería disparadas por fuerzas leales al líder de Libia Muamar el Gadafi cayeron el sábado en territorio de Túnez, mientras se desarrollaban nuevos combates entre soldados y rebeldes libios cerca de la frontera del volátil país del norte de África.
Varias escuelas fueron evacuadas y los residentes corrieron a refugiarse en la ciudad tunecina de Dehiba, que en las últimas semanas ha sido impactada repetidamente por una serie de morteros, mientras los rivales libios luchan por el control de un cruce fronterizo cercano.
Columnas de humo y piedras marcaban el lugar donde habían caído cuatro proyectiles sobre el territorio tunecino.
La batalla entre rebeldes libios y fuerzas pro-Gadafi es por el control del cruce fronterizo de Dehiba-Wazzin, que daría a los combatientes un camino al mundo exterior a través de la región de las Montañas del Oeste.
Aunque los rebeldes controlan el cruce, las fuerzas de Gadafi están a cargo de un puesto fronterizo mucho más grande en el norte.
En la última semana, las batallas se han intensificado en las Montañas del Oeste, uno de los varios frentes del conflicto libio en el que las fuerzas rivales combaten para salir del sangriento punto muerto en una serie de sectores.
Los rebeldes que luchan por terminar con más de cuatro décadas del régimen de Gadafi han recibido el apoyo de las fuerzas aéreas de la OTAN para afrontar a las tropas fuertemente armadas del gobierno libio, pero eso no ha sido suficiente para terminar con el estancamiento en la guerra.
La semana pasada, los combates cerca de la frontera con Túnez se esparcieron a la propia Dehiba, generando furiosas protestas contra Libia por parte de las autoridades tunecinas.
Más de 30.000 refugiados libios han cruzado desde las Montañas del Oeste hasta Túnez, donde muchos están siendo alojados por familias locales.
La simpatía por los rebeldes libios tiende a ser fuerte en Túnez, donde el derrocamiento en enero de un presidente autoritario que llevaba 23 años en el poder propagó revueltas en Libia y generó revueltas en todo el mundo árabe.
