Un atentado suicida causa al menos 56 muertos en Pakistán

PESHAWAR, Pakistán (Reuters) - Un suicida armado con una bomba causó el viernes al menos 56 muertos, entre ellos mujeres y niños, en un atentado en una volátil región pastún cercana a Afganistán, dijeron las autoridades.

El suicida se inmoló cuando cientos de personas estaban reunidas en torno a la oficina de un alto cargo gubernamental en la región Mohmand del noroeste paquistaní, donde las fuerzas de seguridad han reforzado las acciones contra los extremistas talibanes en las últimas semanas.

"La cifra de muertos se ha elevado a 56. Podrían ser más, ya que aún se están sacando personas atrapadas entre los escombros de las tiendas derrumbadas", dijo Rasul Jan, ayudante político de la región, a Reuters. El atentado se produjo a las puertas de su despacho.

Fuentes hospitalarias dijeron que casi 80 personas resultaron heridas, mientras que las autoridades gubernamentales indicaron que eran aproximadamente 50.

Entre los heridos había varias personas desplazadas por los combates entre las fuerzas de seguridad y los extremistas que estaban recopilando productos de ayuda cerca del lugar de la explosión. Los residentes dijeron que entre los heridos había cinco niños, de edades entre 5 y 10 años, y varias mujeres.

"Estaba a unos 200 metros de la oficina cuando escuché la explosión. No sé cómo ocurrió, pero pude ver varios cadáveres yaciendo en el lugar después de la explosión y gente corriendo en todas las direcciones", dijo Riaz Husain, un testigo.

Las imágenes de televisión mostraron cómo las víctimas eran retiradas de entre los escombros. La explosión también afectó a varios coches y a unas 30 tiendas, según los testigos.

Un responsable en el lugar dijo que la explosión había dañado un muro de una prisión cercana y que varios reos habían escapado.

Pakistán inició el año pasado dos importantes ofensivas en el noroeste de su territorio contra milicianos talibanes, que han dado muerte a cientos de personas en ataques de represalia en todo Pakistán, principalmente en el noroeste, pero también en ciudades importantes.

Dos atentados suicidas dejaron al menos 42 muertos la semana pasada en un ataque contra el santuario más importante de la religión sufi en Pakistán, ubicado en la ciudad oriental de Lahore.