Barcelona, 26 dic (EFE).- La tranquilidad es la tónica general esta noche en las carreteras catalanas ya que al ser festivo en Cataluña, San Esteban, el volumen de tráfico es muy bajo y eso ha reducido el impacto de los cortes de diversas vías a causa de la nieve.
En zonas como Osona (Barcelona) o la Segarra (Lleida) hay una capa de nieve de hasta 15 centímetros pero se espera que la cota de nieve suba en las próximas horas, si bien seguirá habiendo lluvia y mala mar durante el día de mañana.
En estos momentos siguen cortados los accesos a la frontera francesa, tanto por la N-II como por la AP-7 a su paso por la Jonquera.
En total, hay nueve carreteras cortadas, según el Servicio Catalán de Tránsito, la mayoría de ellas en Girona, como es el caso de la N-260 entre Portbou y Setcases, la A-26 en Castellfollit, la GI-524 en Olot (Girona), la C-153, también entre Olot y Santa Maria de Corcó, y la GIP-6041 en Vilajuiga (Girona), entre otras.
En Tarragona y Lleida ya no hay carreteras cortadas, como esta tarde, pero en un total de 35 puntos de la red viaria es obligatorio el uso de cadenas.
En algunos, como en Vielha, ya es habitual, pero en otros como la Cataluña central o en el área de la ciudad de Lleida o Vic, es algo que no ocurre normalmente.
Por ello, la Generalitat pide prudencia a los conductores para que no hagan desplazamientos innecesarios, en especial en tramos Pirenaicos, prepirenaicos y en la Cataluña central y que en caso de que se vean obligados, que lleven cadenas.