Barcelona, 27 oct (EFE).- Una vacuna contra la malaria desarrollada por el equipo liderado por el inmunólogo colombiano Manuel Patarroyo, que ha demostrado su eficacia en monos en un 95% de los casos, podrá estar lista para su aplicación en seres humanos en el plazo de cinco años.
Patarroyo, que ha presentado en el Parque de Investigación de Biomedicina de Barcelona los resultados de esta investigación, financiada por instituciones españolas -entre ellas la Agencia Española de Cooperación- y colombianas, ha explicado a Efe que aunque de momento las pruebas se han hecho únicamente en primates, la similitud de su sistema inmunológico con el del hombre hace presagiar que será aplicable "sin problemas" en seres humanos.
Las reacciones adversas de esta vacuna son mínimas, "casi inexistentes", y su coste de producción "bajísimo", entre 15-20 y centavos de dólar por persona, teniendo en cuenta que habría que vacunar a 2.500 millones de individuos que viven en la zona de influencia de esta enfermedad.
"Junto a una serie de amigos, que quieren mantener su nombre en reserva, queremos crear un consorcio para hacer la vacuna y distribuirla a la Humanidad al precio de coste o gratis", ha asegurado el prestigioso científico.
La revista Chemical Rewiews publicará próximamente un artículo en el que la comunidad científica respalda el resultado de esta investigación que permitirá salvar la vida a varios millones de personas al año.
Patarroyo, que trabaja en este campo desde hace más de tres décadas, fue el artífice en 1987 de la primera vacuna sintética contra la malaria, enfermedad que afecta cada año a cerca quinientos millones de personas y mata a unos tres millones, sobre todo niños menores de cinco años en países del África subsahariana.
El investigador colombiano, premio Príncipe de Asturias de Investigación en 1994, cedió los derechos de aquella primera vacuna a la OMS, aunque el prototipo fue abandonado por no tener la suficiente eficacia, entre el 30 y el 40 por ciento.
Patarroyo continuó su investigación encaminada a obtener una vacuna de eficacia total a través de la metodología desarrollada por el bioquímico norteamericano Bruce Merrifield -que colabora con el profesor catalán David Andreu del Centro de Investigación Biomédica- que fue quien les mostró cómo desarrollar los nuevos métodos químicos para disponer "de todo los fragmentos" para llegar a esta vacuna eficaz en un 95 por ciento de los casos.
El equipo ha vacunado a un grupo de monos del Amazonas, a los que posteriormente inoculó el parásito por vía intravenosa, para comprobar si la protección obtenida era eficaz.
Aunque no es partidario de aventurar una fecha concreta, Patarroyo ha adelantado que el año que viene comenzarán los estudios de vacunas en seres humanos, para luego realizar los estudios de campo, en grandes poblaciones, en uno o dos o tres años.
"En un plazo de unos cinco años se podrá tener el proceso completo y definido para aplicar a los seres humanos", ha asegurado el investigador.
Uno de los objetivos es también lograr una vacuna de una sola dosis, ha señalado el científico, que ha añadido que esta vacuna es fruto de "todo el pueblo de Colombia, la universidad del Rosario, y otras entidades e investigadores que han llevado a cabo este trabajo para el bien de la Humanidad".