
La exministra de Cultura y cineasta Ángeles González-Sinde, finalista del LXII Premio Planeta 2013 con la novela El buen hijo, ha hecho un llamamiento a la sociedad para que participe en política y logre así cambios en la gestión pública, en una rueda de prensa en la que ha reconocido que los últimos seis meses en el gabinete de José Luís Rodríguez Zapatero fueron muy duros: "Debemos apropiarnos de la política", ha evidenciado. González-Sinde gana 150.000 euros por ser finalista del Planeta: "No he visto un problema ético".
González-Sinde ha asegurado que sería saludable para el sistema que existiera más participación, algo que ha contrapuesto con el momento actual, en el que parece que lo más importante es siempre estar derribando a todos los políticos, lo que a la larga puede resultar "fatal".
Por ello, ha hecho un llamamiento genérico a "no estar constantemente derribando a cualquier persona que participe en política", porque no son una casta separada del resto de la sociedad y le entristece pensar que cada vez va a ser más difícil encontrar a personas dispuestas a dar el paso -Sinde ejerció como ministra independiente entre 2009 y 2011 en el segundo Gobierno del PSOE liderado por Zapatero-.
La extitular de Cultura, pese a destacar que su experiencia como ministra fue muy enriquecedora y le ha hecho tener un mejor concepto de la política.
Sinde, que lanzó una ley contra la piratería en Internet que motivó la dimisión del entonces presidente de la Academia del Cine Álex de la Iglesia y que finalmente ha sido aprobada bajo el mandato de José Ignacio Wert, ha admitido que, una vez acabada su etapa en el Gobierno, fue necesario organizar todas las emociones que había dejado guardadas.
La exministra ha confesado que uno de sus hermanos murió en un accidente de moto durante su mandato. El cargo público que ocupaba por aquel entonces no le permitió vivir como una "persona normal" los acontecimientos.
También en clave personal, y pidiendo que no se le malinterprete, ha explicado que cuando llegó al cargo le causó sorpresa ver que, a diferencia del cine, que funciona como un equipo jerarquizado en el que todos van a una, en política no es igual: "En el cine la lealtad es fundamental. En política no siempre es así", ha dicho.
"Un director de cine manda mucho más que un ministro en su Ministerio", ha señalado, dado que en ocasiones no resulta tan sencillo cambiar modos de hacer las cosas y actitudes adquiridas.
González-Sinde ha lamentado también las suspicacias despertadas en algunos periodistas con preguntas sobre el hecho de que gane un premio literario después de ser ministra de Cultura, al entender que dichas suspicacias "en una parte son legítimas, pero en otra parte pecan de ingenuidad".
'El buen hijo'
La novela de Sinde está escrita en primera persona y cuenta la historia de Vicente, un hombre de 36 años que vive y trabaja con su madre viuda en el negocio que ella regenta, hasta que una serie de sucesos lo llevan a sentirse insatisfecho y a querer escapar de este asfixiante entorno.
La cineasta ha destacado que el libro y el premio es un nuevo principio para ella, tras constatar que la escritura no sólo sirve para ordenar el mundo, sino para reordenarse a uno mismo. Además, ha asegurado que el galardón le anima a seguir escribiendo y que, de hecho, tiene empezada otra novela.
Sinde, que ha repasado su trayectoria cultural, ha explicado las "enormes diferencias" entre elaborar un guión y una novela, y ha señalado el desafío que ha supuesto enfrentarlo, para lo que el escrutinio de los lectores y críticos de un premio tan conocido como el Planeta servirán para determinar si cuenta con la calidad y capacidad de atraer al público.