Lima, 15 feb (EFE).- La ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables de Perú, Ana María Romero Lozada, pidió a la Fiscalía que reabra la investigación por los abusos sexuales de integrantes de la sociedad apostólica Sodalicio de Vida Cristiana, entre 1975 y 2002, tal como lo confirmó una investigación interna.
La ministra le expresó en un oficio al fiscal de la Nación, Pablo Velarde, que "es muy importante para la regeneración moral que requerimos como sociedad, que este tipo de delitos no queden en la impunidad".
El actual superior general del Sodalicio, Alessandro Moroni, adelantó que al menos 36 personas, 19 de ellas menores, fueron presuntamente víctimas de abusos sexuales en el Sodalicio entre 1975 y 2002, por parte de sus líderes, entre ellos su fundador, el peruano Luis Fernando Figari, según una investigación interna de la congregación.
Además de Figari, quien se encuentra en Roma apartado de la congregación, los otros agresores sexuales identificados dentro del Sodalicio son el fallecido Germán Doig, Virgilio Levaggi y Jeffrey Daniels, los dos últimos ya retirados de la sociedad, quienes abusaron de 19 menores y 10 adultos entre 1975 y 2002.
Las siete víctimas restantes detectadas en la investigación fueron aparentemente agredidas sexualmente por tres miembros actuales del Sodalicio y otro integrante ya retirado.
"A la luz de estos nuevos elementos, me permito reiterarle el pedido de profundizar las investigaciones para determinar las responsabilidades penales de estos presuntos agresores y quienes resulten responsables y llevarlos ante la justicia", afirmó Romero Lozada.
"Es necesario agotar todos los esfuerzos para ello, coordinando de ser preciso, con las autoridades jurisdiccionales de los países en los que residen", agregó la ministra peruana.
La fiscal María del Pilar Peralta, titular de la vigésimo sexta Fiscalía Penal de Lima, archivó en enero una denuncia presentada por cinco víctimas contra un grupo de líderes del Sodalicio, entre ellos Figari, por los delitos de violación de menores, secuestro, lesiones graves y asociación ilícita para delinquir.
Los querellantes son José Enrique Escardó, Martín López de Romaña, Vicente López de Romaña, Óscar Osterling y Pedro Salinas, periodista que recogió junto a su colega Paola Ugaz los testimonios de sus compañeros bajo seudónimos en el libro "Mitad monjes, mitad soldados", y cuya publicación motivó la investigación desde 2015.
Con el adelanto del informe final de las investigaciones del Sodalicio, Romero-Lozada informó que encargará a la Procuraduría del Ministerio de la Mujer que se apersone al Ministerio Público con el fin de impulsar las investigaciones para determinar responsabilidades penales de los presuntos responsables de este caso de abuso sexual.
Moroni publicó ayer un comunicado con "la parte más fuerte y grave de las conclusiones" de la investigación, cuyo informe final anunció que será publicado hoy en las redes sociales, y posteriormente presentado en la Fiscalía de Perú.
El superior destacó que los delitos ocurrieron "en un pasado distante, lo que no los hace menos graves, pero sí difíciles de probar de manera irrefutable", por lo que los abusos enumerados en el informe están reconocidos en base a la verosimilitud de los más de 200 testimonios recogidos en menos de un año.
La investigación estuvo a cargo del irlandés Ian Elliot, especialista en asistencia a víctimas, y las estadounidenses Kathleen McChesney, ex número tres del FBI, y Mónica Applewhite, experta en prevención de abusos.
En su propia investigación, el Vaticano acreditó que Figari cometió abusos sexuales a al menos un menor en 1974 y el viernes pasado le prohibió volver a tener contacto con el Sodalicio, regresar a Perú y hablar con medios de comunicación.