
Madrid, 8 feb (EFE).- Dos empresarios acusados en el caso Guateque, la mayor trama de corrupción del Ayuntamiento de Madrid, han admitido hoy en el juicio pagos a un intermediario conocido como "el arregla todo", pero destinados a funcionarios, para agilizar los problemas que había con las licencias de un par de inmuebles.
Se trata de Julián Félix Serrano y Salvador José del Campo, quienes han comparecido hoy en una nueva sesión de la vista oral que se celebra en la Audiencia Provincial de Madrid y por la que se enfrentan a una pena de 13 y 10 años de prisión, respectivamente.
Hasta siete "tramas de tráfico de sobornos y favores" se urdieron en el entorno del Ayuntamiento para, según el Ministerio Público, agilizar expedientes urbanísticos con la ayuda de funcionarios que "utilizaban sus cargo técnicos como medio para lucrarse".
Julián Félix Serrano ha reconocido ante el tribunal que tanto él como su socio Salvador José del Campo, ambos ligados a la empresa Rehabilita Inmuebles S.L., acudieron a Mario Mínguez, entonces funcionario de Disciplina Urbanística en la Junta de Centro, para que éste les ayudara a acelerar la tramitación de varias licencias.
Mínguez, amigo de Serrano desde hace años, les puso en contacto a su vez con el empresario Carmelo García, que se enfrenta a 21 años de prisión, para que contrataran sus servicios y acordaran un precio. Este dirige un estudio de arquitectura, que tramita los proyectos de licencias.
"Le dimos entre 6.000 y 7.000 euros a Carmelo por facilitar la tramitación de dos expedientes" ha confesado Serrano.
Salvador José ha explicado que durante la reunión con Mínguez éste les recomendó acudir a Carmelo García para solucionar su problema, quien decía que era conocido como "el arregla todo".
Al poco tiempo de contratar sus servicios, ha detallado Salvador José, los dos empresarios pudieron ver que su expediente estaba tramitándose en el Ayuntamiento "sin atender a los requerimientos legales" del consistorio, lo que llamó su atención.
"Carmelo me dijo que no me preocupara", ha continuado, "me dijo que si algo pasaba ellos harían magia. Que si el anterior expediente desfavorable tenía que desaparecer, desaparecería".
Ante las preguntas del fiscal relacionadas con el dinero, Salvador José ha dicho que no le parecían cantidades "demasiado caras" para el tamaño de las obras que estaban realizando, pero ha indicado que Carmelo les siguió pidiendo dinero.
"Recuerdo una conversación con Julián Serrano en la que me decía que Carmelo era un sinvergüenza. Nos pedía dinero después incluso de estar detenido por el inicio de esta causa" ha puntualizado Salvador José.
Hoy también han declarado José Luis Moreno López, funcionario de la Junta de Chamartín, y Alfonso García López, funcionario de la Junta de Carabanchel, quienes se han declarado inocentes y niegan su participación en ninguna actividad ilegal.
Moreno López, que se enfrenta a una pena de tres años y seis meses de prisión, ha defendido que nunca "participó en ninguna inspección fraudulenta" ni cobró dinero irregular.
Y García López, para quien el fiscal pide también tres años y seis meses de prisión, ha dicho que no recibió dinero procedente de sobornos y que su actuación siempre fue acorde con el "procedimiento que consta en la ley".
El juicio continuará mañana con la declaración de más acusados.