El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha defendido en el Senado la Proposición de Ley para reformar la capacidad del Tribunal Constitucional para hacer cumplir las sentencias. En respuesta a Josép Lluís Cleries I González, que ha pedido la retirada de la iniciativa, ha advertido que la reforma sólo le puede preocupar a quien no tiene intención de cumplir las resoluciones del tribunal de garantías.
MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
Catalá ha respondido a dos preguntas formuladas sobre el mismo asunto en la sesión de control celebrada este martes en el Senado, la primera por el senador del Grupo Parlamentario de Convergencia y de Unió y la segunda formulada por el expresidente de la Generalitat José Montilla.
Al enunciar la primera, el senador Cleries ha señalado que la cuestión le había sido formulada a la vicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría, a la que ha acusado de no dar la cara y responder por boca de un ministro al que él cree que se ha "ninguneado" en este asunto, optando por un trámite parlamentario que exime de los informes previos de órganos como el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y el Consejo de Es tado.
"Ustedes lo que buscan es perseguir al president Artur Mas" ha dicho el senador de Convergencia, que ha acusado al Gobierno de tratar de lograr por vía de los tribunales lo que no son capaces de lograr con las urnas. Ha comparado el TC que saldrá de la reforma de "una especie de tribunal de orden público" y ha añadido que el Gobierno pretende pasar con la justicia "por encima de la democracia".
Ante estas acusaciones, el ministro se ha mostrado "sorprendido" por el hecho de que para Cleries una proposición de ley carezca de legitimidad democrática. "Es sorprendente como ustedes creen que las leyes estén encima de la democracia, no me extraña que con estas confusiones esté pasando lo que esté pasando en Cataluña", ha remachado.
En su turno de réplica, el senador de Convergencia ha respondido a Catalá que lo que ocurre en Cataluña es que aman a la democracia y ha recordado unas manifestaciones en las que el expresidente del Consejo de Estado Francisco Rubio Llorente señalaba que la reforma está mal tramitada porque se salta los informes preceptivos. "Hacen un mal uso de su mayoría absoluta, y lo hacen porque se les acaba", ha apuntado el senador.
Para concluir el agrio debate, Catalá ha recordado que en los últimos días también se han escuchado voces favorables a la reforma, que está orientada a fortalecer al Tribunal Constitucional.
¿"A quién le puede importar que el Tribunal Constitucional tenga capacidad de cumplir las sentencias? Pues a quien no tiene intención de cumplirlas", ha señalado el ministro, tras recordar que la Ley Orgánica que regula este órgano se ha reformado hasta en ocho ocasiones y que el trámite de proposición de Ley y de urgencia son trámites que existen en el parlamento.
"No acabo de entender sus preocupaciones -ha concluido el ministro-. Les preocupa el fondo de la cuestión, que cuando el Tribunal Constitucional dicte una sentencia no haya nadie que no la cumpla, como estaba sucediendo hasta ahora. Quienes aman la democracia deberían cumplir la ley y no crear conflictos entre los españoles".
En una segunda pregunta sobre el mismo asunto, formulada por el ex presidente Montilla, el titular de Justicia ha señalado que no existen razones oscuras para la reforma, pues el objetivo es "algo tan sensato y razonable" como fortalecer la posición del tribunal y dotarle de capacidades para hacer cumplir sus resoluciones.
Montilla le ha respondido que en la actual ley ya existen elementos para ejecutar las sentencias, una función que también pueden cumplir los tribunales ordinarios. "Ustedes lo que hacen es una cruzada que abunda en el desprestigio del Tribunal Constitucional", ha censurado el expresidente de la Generalitat.
Para el senador la iniciativa cuenta con la oposición de todos los grupos parlamentarios, a lo que se suma que se ha tramitado prescindiendo dictámenes que "seguramente no serían positivos". "Se llenan la boca sobre la unidad de España pero trabajan para facilitar su ruptura, añaden gasolina a un incendio para arañar unos votos", ha afirmado, tras añadir que la situación actual es peor que la de hace cuatro años.
Ante estas acusaciones el ministro Catalá ha señalado que bueno tener memoria y recordar quien apoyó las ocho reformas anteriores de la Ley del Tribunal Constitucional, que fueron apoyadas unilateralmente por el partido socialista. ¿Aquéllas sí tenían legitimidad democrática y ésta no la tiene, se ha preguntado.