
Barcelona, 14 jul (EFE).- Un joven de 19 años ha aceptado hoy una pena de 14 años y 3 meses de prisión tras mostrar su arrepentimiento por haber matado a navajazos a un hombre al que atracó de madrugada en Badalona (Barcelona), donde llegó tras un trayecto en metro en el que robó a dos pasajeros a punta de navaja.
En la sección quinta de la Audiencia de Barcelona se ha celebrado hoy el juicio contra José Palomino, para quien el fiscal pedía inicialmente 30 años de prisión por el homicidio de un hombre de 64 años al que atracó la madrugada del 3 de mayo de 2014 y por el robo con violencia a los dos pasajeros del metro, uno de ellos menor de edad.
Ante el tribunal, el joven, que ahora tiene 19 años, ha reconocido los hechos en un breve interrogatorio, en el que ha insistido varias veces en asegurar que estaba "muy arrepentido".
Además, ha alegado que había consumido alcohol y drogas, extremo que ha corroborado uno de los chicos a los que asaltó en el metro, que ha subrayado que tenía las pupilas muy dilatadas.
Tras la confesión y el arrepentimiento del acusado, el fiscal ha rebajado su petición inicial de 30 años de prisión hasta los 14 años y 3 meses, al aplicar la atenuante de consumo de alcohol y drogas y porque tiene diagnosticado un transtorno psicosocial y una inteligencia limitada.
En concreto, el fiscal ha pedido para el acusado una pena de 9 años de cárcel por un delito de homicidio -inicialmente solicitaba 15 años- y otra de cinco años y 3 meses de prisión en total por tres delitos de robo con violencia y uso de arma -inicialmente pedía otros 15 años-.
El abogado de la defensa se ha adherido a la petición del fiscal, en un acuerdo de conformidad que tendrá que ser ratificado en sentencia.
Los hechos ocurrieron la madrugada del 3 de mayo de 2014, cuando el acusado, que ya tenía antecedentes penales, subió al metro en la estación "Besòs Mar" en Barcelona, a las 05.03 horas, en dirección a "La Salut", ya en Badalona, donde llegó a las 05.47 horas, tras hacer dos transbordos.
Según el relato del fiscal, que hoy ha admitido el acusado, durante el trayecto en metro se dirigió a uno de los pasajeros del vagón, a quien le exigió que le entregara su teléfono móvil, blandiendo una navaja de grandes dimensiones que llevaba.
Inmediatamente después, se dirigió a otro pasajero, en este caso menor de edad, a quien también le exigió que le entregara el teléfono móvil. El chico se resistió, por lo que el acusado le pinchó con la navaja a la altura del pecho, ante lo que, finalmente, éste le entregó el teléfono.
Esta segunda víctima, que no reclama ningún tipo de indemnización, sufrió una herida incisa de un centímetro en el tórax, que no puso en riesgo su vida.
Posteriormente, tras salir del metro, el acusado caminó por la avenida Marqués de Sant Mori y por la calle de Juan Valera, en Badalona.
Hacia las 06.00 horas de la mañana, cuando se encontraba a la altura del número 156 de la calle Juan Valera, se dirigió inesperadamente contra un hombre de 64 años que pasaba por la zona y, tras un forcejeo, le arrebató una bolsa que llevaba.
En el forcejeo, el acusado, utilizando el mismo puñal con el que había atracado a los dos jóvenes en el metro, le asestó varias puñaladas a la víctima, que acabó falleciendo debido a las lesiones de arma blanca.
Tras dejar malherida a la víctima, el joven huyó corriendo de la zona y abandonó la bolsa que había robado al hombre, tras comprobar que en su interior sólo había un yogur, unas natillas y unas rosquillas que llevaba para desayunar.