El acusado de asesinar a la limpiadora de un gimnasio dice que ni la conocía ni la mató

Madrid, 29 jun (EFE).- El hombre acusado de matar a la limpiadora de un gimnasio de Collado Villalba (Madrid) en 2008 ha negado hoy que lo hiciese porque según ha dicho no la conocía ni tenía motivos para ello, y ha sostenido que pudo encontrarse sangre suya en el local porque cree que le sangró la nariz durante una visita previa.

La Audiencia Provincial de Madrid juzga desde hoy con jurado popular a Jesús María J.S., argentino con residencia irregular en España, por el asesinato de una mujer de 59 años y nacionalidad ecuatoriana en el gimnasio Centro Deportivo Villalba el 25 de octubre de 2008.

El acusado permanece en prisión desde mayo 2013 por la muerte de otra mujer, su pareja, por la que fue detenido en ese momento y posteriormente condenado a 16 años de cárcel por la Audiencia Provincial.

Cuando estaba en prisión por este crimen de 2013 se le imputó el asesinato del gimnasio de 2008, tras comparar sus huellas y su ADN con el hallado en este lugar, en el que según el relato de la Fiscalía golpeó a la limpiadora con su fregona y la asfixió.

El Ministerio Público pide para él 19 años de cárcel por asesinato con alevosía, mientras que su defensa solicita la absolución porque considera que Jesús María no conocía a la víctima, no la mató y solo hay pruebas indirectas que le vinculan con el lugar del crimen, según ha explicado su abogado, José Megías.

Hoy se ha elegido el jurado popular que dará el veredicto sobre el encausado, que ha declarado a continuación, asegurando que no conocía a la limpiadora del gimnasio, no tenía motivos para matarla ni le pegó ni asfixió.

A preguntas de la Fiscalía ha aclarado que él acudió al local dos días antes del crimen con unos amigos para preguntar por las tarifas y, si se encontró sangre suya en ese lugar, pudo ser porque le sangró la nariz.

Esta explicación la ha dado tras varias preguntas de la fiscal, a la que no ha podido precisar si llegó a matricularse en el gimnasio durante esa visita -"creo que no", ha dicho- ni dónde vivía exactamente en ese momento.

"Podría vivir en la dirección que me dice -junto encima del gimnasio- o a la vuelta de la esquina", ha dicho tras incidir en que tras llegar a España en 2005 vivió "en muchos sitios" de diferentes provincias.

También ha negado que la víctima le debiera dinero, así como tener constancia de que los dueños del gimnasio tuvieran alguna deuda con él o que alguien le hubiese encargado matar a la mujer porque su marido debía dinero por negocios relacionados con la droga.

La fiscal ha pedido a la sala que entregue al jurado popular la declaración que hizo el encausado en su día en el juzgado para que vean "las contradicciones" en las que ha incurrido hoy.

Jesús María ha subrayado que tras ser detenido por el asesinato de su pareja en 2013 -un crimen que ha asegurado que tampoco cometió-, se prestó voluntariamente a que le extrajesen y analizasen su ADN "sin ningún problema".