
Madrid, 11 jun (EFE).- La Policía Nacional ha desalojado hoy el centro social "okupado" Patio Maravillas, un edificio vacío en el centro de Madrid que ha acogido durante los últimos años a colectivos como Juventud SIN Futuro que han servido de cantera para algunas de las nuevas fuerzas políticas emergentes.
Del entorno del Patio Maravillas, que estaba ubicado en el edificio de la calle del Pez 21 desde hace casi seis años, después de haber estado cerca de otros dos años en otro inmueble próximo, han surgido algunos rostros conocidos de Podemos como el recién elegido diputado de la Asamblea de Madrid Pablo Padilla.
También concejales de Manuela Carmena, como el guionista Guillermo Zapata, uno de los promotores de Ganemos, tienen una fuerte vinculación con el proyecto previa a su entrada en la política institucional.
Además, figuras como la candidata al Ayuntamiento de Barcelona Ada Colau o el número dos de la lista de Manuela Carmena, Nacho Murgui, han apoyado el proyecto públicamente, como también lo han hecho personas de la cultura como el grupo Amaral o el cantautor Nacho Vegas.
El Patio Maravillas vivía bajo amenaza de desalojo desde el pasado 20 de marzo, cuando expiró el plazo de un mes dado por un juzgado para que los colectivos que lo usan abandonasen el inmueble.
El auto del Juzgado de Instrucción número 45 de Madrid, que resolvió la denuncia interpuesta en otoño de 2014 por la propietaria del edificio, la empresa inmobiliaria Nivel 29, advirtió en su momento de "deficiencias de seguridad" en el edificio y del riesgo que estas suponían para los usuarios del inmueble y los viandantes.
En cumplimiento de ese auto, la Policía Nacional ha entrado a las 5 de la madrugada de hoy en el edificio, del que su único ocupante en ese momento ha huido por el tejado, por lo que no se han producido incidentes.
En declaraciones posteriores, la delegada del Gobierno en Madrid, Concepción Dancausa, ha recordado que la Policía tiene la "obligación" de cumplir las órdenes judiciales de desalojo, como ha hecho hoy en este edificio, que en pocas horas ha sido tapiado con ladrillo por la empresa propietaria.
Mientras esto ocurría, el diputado autonómico de Podemos Pablo Padilla, que ha acudido a solidarizarse con el colectivo, ha declarado a Efe que el desalojo "tiene una intencionalidad política" y ha defendido que colectivos como éste tengan la posibilidad de acceder a los edificios vacíos con el visto bueno de la administración.
El número 5 y jefe de campaña de la candidatura de Podemos en la Comunidad de Madrid ha opinado que "resulta bastante curioso y sorprendente que un gobierno (municipal) al que le quedan dos días, un gobierno moribundo, que además en los últimos meses carecía prácticamente de legitimidad ante la ciudadanía, decida dar un golpe de efecto" como a su juicio es este desalojo.
A su vez, una portavoz del centro ha dicho a Efe que esperan poder negociar cuanto antes con el nuevo gobierno municipal para conseguir la cesión de un edificio, que entienden que "es lo legítimo y lo democrático".
Para esta portavoz, que también ha relacionado lo ocurrido hoy con el Ayuntamiento, el desalojo de hoy "es una pataleta de un gobierno saliente, una especie de venganza a tres días de un nuevo consistorio que se constituye el sábado".
Una participación que el Gobierno municipal ha rechazado al negarse incluso a comentar el desalojo e incidir solamente en que ni siquiera ha participado la Policía Municipal.
En la misma línea que el colectivo, la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (Fravm) ha reclamado al nuevo Gobierno de la capital que ceda un espacio de titularidad pública al Patio Maravillas y también al "tejido asociativo del barrio".