
Madrid, 7 ene (EFE).- El hombre que arrojó el pasado viernes a un policía a las vías del tren en Madrid, que murió arrollado, permanece ingresado grave en la UCI del hospital 12 de Octubre, donde ha pasado oficialmente a disposición judicial, aunque el juez no ha podido tomarle declaración debido a su estado.
Ali Raba Yode pasó oficialmente a disposición judicial el lunes, tres días después de que, según se ve en un vídeo, se tiraba a las vías del tren en la estación de Embajadores arrastrando consigo al agente Francisco Javier Ortega, que murió en el acto.
Así lo han confirmado a Efe fuentes policiales, que han precisado que se le imputa un delito de homicidio.
Fuentes jurídicas han precisado que el caso recayó en el Juzgado de Instrucción número 4 de Madrid, cuyo titular, Marcelino Sexmero, aún no ha podido tomar testimonio a Ali Raba Yode debido a su estado.
Se prevé que, como suele ser habitual en estos casos, una comisión judicial se traslade al hospital, cuando el imputado mejore, para tomarle declaración allí y decidir sobre su situación.
Ali Raba Yode ingresó en estado crítico en el hospital 12 de Octubre, pero ha mejorado y a día de hoy permanece grave pero estable, según ha informado el centro médico.
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