Washington, 10 jul (EFE).- El fiscal general de Bolivia, Ramiro Guerrero, encabezó hoy una delegación gubernamental que reiteró ante el Departamento de Estado de EE.UU. la petición de extradición del expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada y dos de sus exministros.
El gobierno de Estados Unidos ya rechazó en 2012 esa petición, pero Fernando Díaz, de la Fiscalía General boliviana, explicó a Efe que se debió a que "no se cumplieron algunos procedimientos del tratado de extradición".
El Gobierno de Bolivia quiere juzgar a Sánchez de Lozada y a los exministros de Defensa, Carlos Sánchez Berzaín, y de Hidrocarburos, Jorge Berindoagüe, acusados de cometer una matanza, de homicidio, vejaciones y torturas, lesiones graves, privación de libertad y allanamiento de domicilios.
Los supuestos delitos ocurrieron durante la represión, en octubre de 2003, de las protestas por la decisión del Gobierno de Sánchez de Lozada de exportar gas boliviano a Estados Unidos por un puerto chileno.
En los enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad murieron por lo menos sesenta persona.
Guerrero, que llegó a Washington acompañado por funcionarios de los ministerios de Relaciones Exteriores y de Justicia, y dos víctimas del llamado "Octubre negro", acudió al Departamento de Estado acompañando por el embajador boliviano en Washington, el general Freddy Bersatti.
Díaz señaló que la petición de extradición anterior no se presentó acompañado por una traducción de los documentos al inglés realizada por un organismo oficial acreditado ante el Gobierno de Estados Unidos.
Siguiendo el proceso debido, el Departamento de Estado debe enviar la petición de extradición al Departamento de Justicia, que evaluará las pruebas y las acusaciones antes de llegar a una decisión.
Sánchez de Lozada y Sánchez Berzaín están también procesados en un caso civil en Estados Unidos promovido en mayo pasado por familiares de las víctimas de la violencia de 2003 en Bolivia.
Los abogados que defienden a los antiguos responsables bolivianos han pedido al juez estadounidense que revise su decisión y que no permita que avance la acción civil, sobre la que el magistrado puede tomar una decisión final sobre este asunto en agosto.
Tras los incidentes del Octubre Negro, Sánchez de Lozada renunció a la Presidencia de bolivia el 17 de octubre de 2003 y viajó a Estados Unidos, donde permanece desde entonces.
Por ese mismo caso, el Tribunal Supremo de Justicia boliviano condenó en 2011 a dos exministros y cinco exjefes militares que ejercían el mando en 2003, y que fueron condenados a penas que van de tres a quince años de prisión.
El juicio quedó en suspenso para el expresidente y los dos exministros hasta su extradición, ya que la legislación boliviana no permite los juicios en ausencia.
Relacionados
- Bolivia reitera pedido de extradición de expresidente y dos exministros
- Bolivia reitera en EE.UU. el pedido de extradición de un expresidente y dos ministros
- Bolivia le pedirá de nuevo a EE.UU. en julio la extradición del expresidente Lozada
- Bolivia avanza en el trámite previo al pedido a EE.UU. de extradición de expresidente